Son muchos los que pasan las navidades alejados de sus seres queridos, bien por motivos personales, económicos o profesionales. Sin embargo, siempre que se les presenta la oportunidad reservan un vuelo para volver a casa y pasar las fiestas con su familia, incluso cuando se les presenta otra alternativa. Esta es la disyuntiva que ha utilizado Iberia en su último anuncio navideño, un spot que huye de lo comercial y lanza un dilema a través de un experimento social con cámara oculta en el que cuatro pasajeros deben elegir entre un viaje con todo incluido (vuelo, alojamiento, dietas, etc.) o viajar a casa por Navidad.
La campaña, titulada "El dilema de la Navidad", está protagonizada por cuatro viajeros reales que tienen un billete para regresar a casa en fechas próximas a las navideñas. En el vídeo conocemos, entre otros, a Manuel, sevillano residente en Perú desde hace ocho años y a Pierina, peruana que vino a estudiar y trabajar a Madrid y que no ve a su familia desde hace tres años.
A la hora de embarcar, el personal de tierra de Iberia les presenta la siguiente alternativa: coger el vuelo que tenían reservado o cambiar el billete y viajar al destino con el que siempre habían soñado. A partir de aquí empiezan a cuestionarse a sí mismos sobre qué pesa más, si su familia o aventurarse a viajar a otro lugar. A través de una transmisión en directo se incluyeron las reacciones de los familiares de los protagonistas mientras estos debatían qué hacer, añadiendo todavía más emoción a la situación. Finalmente, y tras decidir no cambiar el billete, el anuncio concluye resaltando que, efectivamente, "el destino más deseado es siempre volver a casa". A continuación se incluye el spot completo:
La aerolínea buscaba una forma original de mostrar las reacciones humanas ante una propuesta genuina que, a su vez, permitiera acercar el sentimiento navideño a los espectadores, saturados de las típicas imágenes de gente abrazándose en los aeropuertos que se repiten con tanta asiduidad durante estos días. Así, Iberia nos invita a ordenar nuestras prioridades al mismo tiempo que nos recuerda la importancia de los vínculos familiares frente a los deseos personales.
Como parte previa a esta campaña, la aerolínea ha colocado tarjetas de embarque gigantes en las fachadas de varios edificios a lo largo de toda España, en las cuáles se puede leer el nombre de los dueños de dichas viviendas o sus familiares, simulando el vuelo de regreso a casa de estas personas por Navidad. Uno de estos inmueble ha sido la casa de la abuela del influencer de viajes Daniel Illescas, en Castellón de la Plana, que el pasado jueves amaneció con esta decoración.