Donald Trump se prepara para regresar a la Casa Blanca en 2025, pero su primer mandato dejó un legado de promesas ambiciosas que no llegaron a cumplirse. Con la xenofobia como uno de los pilares de su campaña presidencial de 2016, Trump aseguró que transformaría la política migratoria de Estados Unidos mediante medidas radicales, como las deportaciones masivas y la construcción de un muro fronterizo financiado por México.
Ahora se plantean dudas sobre los verdaderos logros de la primera administración de Trump. En particular, muchos se preguntan si logró cumplir su promesa de deportar a 11 millones de inmigrantes ilegales en Estados Unidos y qué otros objetivos importantes quedaron sin concretarse.
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En su primera campaña presidencial, Donald Trump prometió deportar a los más de 11 millones de inmigrantes ilegales en Estados Unidos. No obstante, ya en el cargo, redujo esta cifra a dos o tres millones debido a que se enfocó principalmente en migrantes con antecedentes penales o vínculos con pandillas y el narcotráfico.
En el año fiscal 2018, se llevaron a cabo 256.000 deportaciones, un ligero aumento respecto al año anterior, pero muy lejos de los niveles alcanzados durante la administración de Barack Obama, que en 2012 registró un pico de 410.000 deportaciones. Además, Trump intentó cancelar el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA). Puso en riesgo a más de 700.000 jóvenes conocidos como Dreamers. Aunque logró endurecer ciertas políticas migratorias, no cumplió con su ambiciosa meta inicial.
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Además de no cumplir su promesa de deportar a todos los inmigrantes indocumentados, Donald Trump dejó pendientes otras 2 promesas destacadas de su primera campaña presidencial:
