El mundo de los animales siempre ha sido tan maravilloso como incierto, pero a medida que pasa el tiempo y con los avances en la ciencia, esta incertidumbre se vuelve realidad que se plasma en estudios e investigaciones. En este sentido, existen animales que se sienten atraídos por las frutas demasiado maduras y el néctar rico en alcohol, de esta manera, hay estudios que certifican que hay animales que consumen alcohol por gusto propio.
Para saber si los animales pueden consumir alcohol, primero tenemos que atender a cómo se origina este. El alcohol es una sustancia depresora del Sistema Nervioso Central que inhibe progresivamente las funciones cerebrales. Afecta a la capacidad de autocontrol, produciendo inicialmente euforia y desinhibición, por lo que puede confundirse con un estimulante. El alcohol se puede conseguir a través de dos formas: por fermentación y por destilación.
Por fermentación se trata de aquellas bebidas naturales elaboradas exclusivamente a partir de la fermentación de alimentos como la uva, los cereales, los frutos carnosos o las bayas. Son características de este grupo el vino, la cerveza y la sidra.
Y, por otro lado están las bebidas destiladas, son todas aquellas bebidas obtenidas por destilación de productos fermentados, por maceración en alcohol etílico o por adición de aromas, azúcares u otros productos edulcorantes al alcohol etílico o destilados, o las mezclas de las mismas entre sí o con otras bebidas, para obtener mayores concentraciones de alcohol, superando los 15º. Entre ellas el orujo, el pacharán, el vodka, el whisky, el ron o la ginebra.
Ahora bien, existen animales que pueden llegar a ingerir alcohol mediante la primera forma de elaboración, pues se sustentan a través de alimentos como las uvas, cereales, frutos carnosos o bayas. Existen dos tipos de animales que se emborrachan de esta manera. Aunque es muy difícil saber la tolerancia que tienen las especies animales a estas sustancias, algunos científicos sostienen que los animales disponen de una alta resistencia al alcohol, debido al factor decisivo que supone la supervivencia.
Algunas especies que se conocen por ingerir alimentos con cierto porcentaje de alcohol son las Musarañas arbóreas, la mosca de la fruta o el loris perezoso. En muchos casos, estos animales pueden experimentar efectos nocivos derivados de la embriaguez. Estas especies de musarañas también se alimentan del néctar de las palmeras bertram, que se fermenta rápidamente, convirtiéndose en un jarabe dulce con más de un tres por ciento de alcohol.
Por otro lado están los Ampelis americanos o también conocidos como Bombycilla Cedrorum. Conocidas por su llamativo plumaje con una cresta y una máscara negra en los ojos. Estas pequeñas aves se atiborran a bayas durante un gran periodo de tiempo.
Estos pequeños pájaros se emborrachan debido a comer bayas demasiado maduras del árbol de la pimienta brasileña. Aunque se trata de una gran fuente de energía, la levadura natural fermenta la fruta madura, conviertiéndo las moléculas de azúcar en etanol y dióxido de carbono, llegando así a emborrachar a las aves. Estas acaban muriendo al estrellarse contra cualquier superficie por no poder volar correctamente. En este caso son los animales que mejor toleran el alcohol.
Esto se ratifica en un estudio de 2020 dirigido por el zoólogo de la Universidad de Poznán (Polonia) Piotr Tryjanowski. En esta investigación Piotr analizó varios artículos científicos en los que se documentaron hasta 55 especies de aves que beben alcohol, incluidos animales semisalvajes y mascotas. Ante la pregunta de ¿Por qué lo hacen? afirma Tryjanowski que "probablemente por la misma razón por la que nosotros vamos a los bares". Pero, de igual manera afirma que consumen estos alimentos más por sus valores nutritivos que por el alcohol.
