Mantener una vida cerebral activa es fundamental para preservar la salud mental a medida que envejecemos. Actividades como leer, aprender un nuevo idioma o practicar un instrumento musical no solo enriquecen nuestra mente, sino que también ofrecen una protección contra enfermedades como el Alzheimer y otras demencias.
Estas actividades estimulan las conexiones neuronales, mejoran la memoria y promueven la neuroplasticidad, lo que contribuye a mantener el cerebro en forma. Ahora, una nueva investigación ha revelado que, además de estas actividades, ciertas profesiones también pueden ofrecer neuroprotección, contribuyendo a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas.
Un estudio realizado por investigadores estadounidenses y publicado en la revista The BMJ sugiere que las ocupaciones requieren un procesamiento espacial y de navegación constante, tienen niveles más bajos de mortalidad por enfermedad de Alzheimer en comparación con otras profesiones.
Aunque los hallazgos del estudio son observacionales y no pueden confirmar un vínculo directo, los científicos indican que las actividades laborales que demandan memoria espacial, como la conducción de taxis y ambulancias, podrían estar asociadas con una mayor protección contra esta enfermedad neurodegenerativa.
El estudio hace referencia al hipocampo, una región del cerebro clave en la memoria espacial y la navegación, que se ha demostrado que está mejor desarrollada en los taxistas de Londres en comparación con la población general. Dado que el hipocampo también está involucrado en el desarrollo del Alzheimer, los investigadores plantean que las ocupaciones que exigen un procesamiento espacial frecuente podrían reducir el riesgo de esta enfermedad.
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores analizaron los certificados de defunción de casi nueve millones de personas, abarcando 443 ocupaciones diferentes entre 2020 y 2022. Los datos incluyeron la causa de muerte, la ocupación habitual, y factores sociodemográficos como edad, sexo, raza, grupo étnico y nivel educativo.
De las casi 350,000 muertes por Alzheimer registradas, un 1,03% de los taxistas (171 de 16,658) y un 0,74% de los conductores de ambulancias (10 de 1,348) murieron debido a esta enfermedad. En comparación, la tasa de mortalidad por Alzheimer en la población general fue del 1,69%.
Tras ajustar los datos por edad y otros factores sociodemográficos, los conductores de taxis y ambulancias mostraron las tasas más bajas de mortalidad por Alzheimer entre todas las ocupaciones estudiadas, lo que sugiere que el trabajo cognitivo espacial podría estar desempeñando un papel protector.
Sin embargo, los investigadores enfatizan que estos resultados no son concluyentes y señalan que se necesitan más estudios para determinar si el trabajo cognitivo requerido en estas profesiones realmente afecta el riesgo de Alzheimer y si otras actividades cognitivas podrían tener un efecto preventivo.