El líder de Junts reitera que aún no se dan las condiciones para negociar las cuentas del Estado y asegura que "habrá consecuencias" si no les dejan tramitar la iniciativa que pide una cuestión de confianza a Sánchez
Ultimátum, dos votaciones en contra y reunión en Suiza: Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El presidente de Junts, Carles Puigdemont, ha retado este martes a Pedro Sánchez a convocar elecciones si no es capaz de aprobar los presupuestos generales del Estado este año. “Lo normal sería que no continúe”, ha asegurado el independentista, después de considerar que el presidente del Gobierno se encuentra en una legislatura de debilidad. Puigdemont ha subryado además que, en este momento, no se dan las condiciones ni siquiera para que su partido se siente a negociar las cuentas del Estado.
“Si no cambian mucho las cosas no tiene sentido que sigamos apoyando al Gobierno”, ha insistido Puigdemont en una entrevista en TV3. El expresident de la Generalitat ha reiterado que, más de un año después del acuerdo de su partido con el PSOE para facilitar la investidura de Sánchez, el balance del cumplimiento “no es nada satisfactorio”. Una constatación que ha dicho que no le gusta hacer pero que “tendrá consecuencias” si se mantiene.
El líder de Junts ha justificado así el ultimatum lanzado al Gobierno la semana pasada, que supuso la presentación de una propuesta no de ley (PNL) en el Congreso para debatir la necesidad de que Sánchez se someta a una cuestón de confianza. Pase lo que pase con esta iniciativa, nada puede forzar a Sánchez a someter su cargo al Congreso. Pero la tramitación de la propuesta, por el momento estancada en la mesa, se ha convertido en una prueba para Junts.
“Saben qué pasará si al fnal bloquean [la PNL de Junts], porque se acabará la confianza”, ha asegurado Puigdemont. “A Madrid no vamos a hacer amigos, si eso pasa decidiremos las consecuencias”, ha insistido.
Entre los incumplimientos señalados, Puigdemont ha hablado de diversas cuestiones como la transferencia de las política de inmigración o la ejecución de los presupuestos pasados. Según ha dicho, la cifra de la ejecución en Catalunya quedará en 2024 por debajo del 50%, algo que podría pasar igual el año que viene si ellos aprobasen los presupuestos.
Pero además Puigdemont se ha tomado tiempo para hablar de lo que ha tiladado como “amnistía política”, para diferenciarla de la judicial. Según el expresident, una cosa es que los jueces no apliquen la ley que debería liberarle de las causas que tiene pendientes y, otra diferente, que Sánchez o el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, sigan tratándolo como un “presunto delincuente”.
Tras esa argumentación, Puigdemont ha asegurado que ir a verle a Bélgica sería una forma de concederle la “amnistía política”. Aunque también ha resaltado que eso no es algo que tenga en cuenta a la hora de hacer balance del cumplimiento del acuerdo con el PSOE.
El expresident de la Generalitat y actual líder de Junts ha ofrecido una entrevista en TV3 en horario de máxima audiencia. Una franja habitualmente reservada para el president o el jefe de la oposición, y que en este caso la televisión pública catalana también ha concedido pese a que él renunció al cargo de institucional antagónico al de jefe de Govern. Con todo, TV3 ha considerado que sigue siendo el líder del principal partido de la oposición, por lo que le corresponde esta franja, que de otra forma debería de permanecer vacía.
