Nadie está ni se siente seguro. La victimización y la delincuencia a nivel urbano nacional se han incrementado en los últimos dos años, y pasaron de 23,1% a 27,5%, según el primer reporte del Observatorio del Crimen y la Violencia realizado por la organización Capital Humano y Social (CHS), con datos recopilados hasta diciembre del 2024.
El estudio señala que la extorsión, los préstamos ‘gota a gota’, las estafas y los robos de celulares son los que más afectan a los peruanos. Además, se registra un aumento preocupante de homicidios, lo que convierte al crimen organizado en una amenaza creciente en el país.
Carlos Basombrío, exministro del Interior y uno de los responsables del reporte, explica a La República que el robo callejero sigue siendo el principal detonante de la percepción de inseguridad, mientras que los homicidios cobran mayor relevancia debido a la consolidación del crimen organizado.
Y las cifras le dan la razón. Según el Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef), hasta el 17 de diciembre, la cifra homicidios llega a 1.913, teniendo a Lima como la región con más asesinatos, al registrar 787 casos. Le siguen La Libertad con 261 crímenes y Piura con 111 muertes.
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El informe también precisa que solo en noviembre del 2024 se contabilizaron 105 homicidios relacionados con extorsión y robo agravado. De mantenerse esta tendencia, el 2024 podría convertirse en el año con más homicidios en el Perú, que alcanza una tasa estimada de entre 10 y 11 homicidios por cada 100.000 habitantes, según el reporte de CHS.
El caso de homicidio más reciente sería el del mototaxista Gregorio Eulogio Valverde Obregón (54), quien fue asesinado la noche del lunes a unas cuadras de su casa, en Los Olivos, por dos sujetos a bordo de una moto lineal, presuntamente por negarse a pagar cupos, señalaron otros transportistas.
Las denuncias por extorsión también han aumentado drásticamente. Entre agosto y octubre del 2024 se registraron 498, 566 y 715 denuncias mensuales, respectivamente. Dentro de esta categoría, las denuncias de extorsión agravada sumaron 53 en agosto, 66 en setiembre y 69 en octubre.
Basombrío señala que la lucha contra la extorsión no está funcionando porque “no se ha trabajado en serio todo lo que es investigación y todo lo que es inteligencia, y creo que esa es la explicación de por qué estamos tan mal en la lucha contra la extorsión”. Y según cifras del INPE, hasta agosto del 2024 había 1.186 presos por este delito, mientras que las denuncias acumuladas superan las 50.000.
Por otro lado, el informe también aborda la problemática de la minería ilegal, calificándola como la economía criminal más grande del país. CHS advierte que la ampliación del Reinfo y la censura del ministro de Energía y Minas han favorecido a organizaciones delictivas vinculadas a esta actividad.
Asimismo, el Observatorio del Crimen y la Violencia estima que, debido al alza del precio del oro, las exportaciones ilegales superarán los 6.000 millones de dólares anuales.
Este incremento, según el informe elaborado por CHS con el patrocinio del Banco de Ideas y el BCP, propicia la expansión de actividades violentas asociadas a la minería ilegal, así como la corrupción y penetración en las instituciones estatales.
