Un laboratorio de virología de Australia se encuentra en medio de una crisis luego de perder el rastro de varios virus. El incidente ocurrió en el Laboratorio de Virología de Salud Pública de Queensland y fue confirmado por funcionarios del gobierno como un "incidente mayor".
La situación generó alarma, ya que la pérdida de estos gérmenes pone en riesgo la seguridad pública y despierta dudas sobre los protocolos de control en centros de investigación de alto nivel.
En 2021, un incidente en un laboratorio de Queensland, Australia, desató una alarma sanitaria al perderse el rastro de unas 300 muestras de virus potencialmente letales, como el hantavirus, Hendra y Lyssavirus.
Las autoridades informaron que el problema surgió cuando estas muestras, almacenadas en un freezer, fueron trasladadas o manipuladas incorrectamente. Las autoridades se dieron cuenta de que faltaban los virus en agosto de 2023.
Las muestras extraviadas incluían hantavirus, Hendra y Lyssavirus, todos potencialmente letales para humanos (Fuente: Scientificanimations.com / Wikimedia Commons)
El Ministro de Salud de Queensland, Tim Nicholls, expresó que se está llevando a cabo una exhaustiva investigación para esclarecer lo sucedido y evitar que se repita este tipo de fallos.
"No hay evidencia de riesgo para la comunidad por el incidente de 2021, y nuestro gobierno está trabajando para que eso no vuelva a suceder", dijo Nicholls durante una conferencia de prensa hace pocos días.
Las muestras que se extraviaron contenían virus transmitidos principalmente por contacto con animales, como murciélagos o roedores, los cuales pueden ocasionar infecciones graves o fatales. En particular:
Estas infecciones pueden ser graves o fatales, pero las muestras fuera del freezer pierden peligrosidad(Fuente: CDC/Cynthia Goldsmith / Wikimedia Commons)
Por el momento, no existen razones para generar alarma, ya que no se han registrado casos de Hendra, Lyssavirus ni hantavirus en la zona en los últimos cinco años.
Las autoridades aseguran que, en caso de que las muestras se hayan almacenado fuera de los congeladores, es probable que hayan perdido su capacidad de causar enfermedades poco tiempo después.
El riesgo potencial no es inmediato, pero las autoridades están preocupadas por el fallo en los protocolos de bioseguridad. Se está investigando por qué el laboratorio tardó tanto en darse cuenta de la desaparición de las muestras. Expertos advierten que incidentes similares en el pasado han provocado brotes de enfermedades, como la pandemia de COVID-19.
