DAMASCO, diciembre 16.- El régimen israelí continúa su incursión terrestre en el sur de Siria y amplía el perímetro de la ocupación de nuevas aldeas sirias, por quinto día consecutivo.
Los medios israelíes informan este lunes que Israel ha ocupado más de 370 kilómetros cuadrados de territorio sirio tras la caída del gobierno de Bashar al-Asad y la toma del poder por parte de los grupos armados el 8 de diciembre.
Los informes señalan la expansión israelí a una profundidad de 26 kilómetros desde las laderas del monte Hermón hasta el interior del campo del sur de Damasco a lo largo de la frontera con el Líbano. Las fuerzas de ocupación israelíes han entrado en el triángulo de las localidades Al-Quseir-Koayiah-Maariya en la frontera entre Siria y Jordania.
La entidad sionista está trabajando para estabilizar cuatro aldeas en la cuenca de Yarmouk, en el extremo suroeste de la provincia de Daraa, trece kilómetros al norte de la frontera con Jordania.
Según la cadena libanesa Al-Mayadeen y el medio digital HispanTV, la incursión israelí en Daraa ahora permite a Israel cruzar el río Yarmouk, a través de la presa de Al-Wehda (Presa de la Unidad) entre Siria y Jordania. En el lado oriental del Golán sirio ocupado, el ejército israelí alcanzó unos 12 kilómetros en la provincia de Quneitra y sus zonas rurales orientales.
El régimen de Israel empuja a sirios de Quneitra a éxodo forzoso. Además, las fuerzas israelíes llevaron vehículos de ingeniería hacia la brecha de Beit Jinn en el monte Hermón, con el objetivo de cavar trincheras e impedir cualquier posible conexión con el territorio libanés.
Israel inició su ofensiva para apoderarse de más territorio sirio el 8 de diciembre, después de que militantes apoyados por el extranjero y liderados por Hayat Tahrir al-Sham (HTS) anunciaran la caída del gobierno de Al-Asad tras un rápido ataque de dos semanas.
Las fuerzas israelíes tomaron la llamada zona de amortiguación, que separa los altos del Golán ocupados del resto de Siria, en violación de un acuerdo de retirada de 1974, negociado por la ONU. Igualmente, ha realizado cientos de ataques contra los arsenales de armas estratégicas de Siria y ha destruido la mayor parte de la capacidad defensiva del país árabe. Israel destruyó 500 objetivos militares en Siria con 1800 bombas.
Para estabilizar su ocupación, el gabinete del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aprobó el domingo un plan para ampliar los asentamientos y duplicar la población israelí en los ocupados Altos del Golán sirios.