Sara Climent y Pau de Miguel son los agentes de la Comisaría de Proximidad de Ruzafa de la Policía Local de Valencia que la pasada semana salvaron la vida a un recién nacido de 11 días que se había atragantado con su propio vómito y no respiraba. «Intentamos reanimarle y todo salió como tenía que salir», han asegurado. El incidente tuvo lugar el pasado martes, sobre las 20.30 horas, cuando los agentes se personaron de manera urgente a una vivienda del barrio de Monteolivete, donde un bebé lactante se había atragantado. Al llegar al domicilio, los agentes encontraron a la madre en estado de shock con el bebé en brazos. El lactante no respiraba y presentaba síntomas evidentes de falta de oxígeno, como el color azulado en la piel. Los agentes, en coordinación telefónica con el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU), pusieron al bebé boca abajo sobre el brazo para desobstruir posibles obstrucciones en la vía respiratoria y estimularon los pies para provocar la reacción del bebé. Tras varios intentos, rompió a llorar y recuperó la respiración. Los agentes han sido recibidos este lunes en el Ayuntamiento de València por la alcaldesa, María José Catalá , que les ha felicitado por esta intervención. La primera edil ha confesado que tenía «muchas ganas de conocerles y de agradecerles esa labor» y se ha mostrado «orgullosísima de tener gente así en el cuerpo de la Policía Local». De un lado, Pau de Miguel, uno de los agentes, ha explicado que la alerta les llegó a través de la sala del 092 por un aviso del 112 de una bebé que no respiraba y ha relatado los hechos: «Rápidamente la compañera y yo fuimos para allí y nos encontramos en una situación de 'shock' absoluto de los padres, que estaban obviamente en el peor momento de su vida». «Pudimos practicar unas primeras maniobras de reanimación para que recuperara la respiración. Y luego rápidamente también el SAMU acudió y pudimos salvarle la vida a la pequeña que, por suerte, hoy está en casa », ha expuesto el agente, que se ha mostrado «súper contento y orgulloso» de este reconocimiento. Por su parte, la otra agente, Sara Climent, ha asegurado que fue «un servicio muy emotivo porque, al final, te encuentras con un bebé tan pequeño, tan poquita cosa, que los padres confiaron en nosotros». «Nos acercaron a su bebé para que intentáramos reanimarle y todo salió como tenía que salir», ha subrayado. Por ello, se ha mostrado «muy agradecida y orgullosa» de esta intervención. « Servicios como este no son habituales », ha apuntado Climent, que ha asegurado que los padres del bebé «están muy agradecidos» con ellos. «Nos lo han hecho saber y nosotros, muy contentos de haber podido ayudarles», ha agregado. La alcaldesa de València, María José Catalá, ha resaltado que esta intervención ha sido «un caso de éxito fruto de la coordinación que tenemos en la central de la Policía -Local- con el 112». «Los papás llamaron al 112 y los primeros que aparecimos fuimos la Policía Local de Valencia», ha valorado. «Y digo fuimos porque lo cierto es que siento que este es el equipo de trabajo con el que he abordado los retos más importantes a los que me he enfrentado este año, que han sido varios y estoy muy orgullosa de esa labor», ha continuado. Así, la primera edil ha agradecido su labor a estos dos agentes: «Les he dado las gracias en nombre de todos y es impresionante poder contar con un equipo de trabajo que actúa rápido, que sabe llegar y que, además, sabe reaccionar y es capaz de salvar vidas como es este caso». Catalá ha alabado que Sara y Pau «han cambiado la vida de una familia» y se ha mostrado «muy orgullosa de que formen parte» de su equipo. «Pensad en unas fechas como estas lo distinta que hubiera sido la realidad si ellos no hubieran estado y si no hubieran llegado a tiempo», ha reflexionado.