Hace demasiado tiempo que el Colegio de Médicos de Madrid no cumple con su función esencial, la que sienta las bases para el desarrollo de todas aquellas acciones que en nombre de sus colegiados y colegiadas debe llevar a cabo la Junta Directiva a lo largo de su mandato. No ha sido, ni es en la actualidad, la casa de los médicos. Al entrar en la sede la sensación es de ser extraño, estar como de visita, cuando debería ser un lugar natural de referencia que acoja a sus colegiados, los escuche y sea el punto al que puedan acudir los médicos, ejerzan donde ejerzan, si precisan algo relacionado con su profesión. Hoy por hoy, sin embargo, quizá sea el último lugar al que se nos ocurriría acudir en busca de asesoramiento o ayuda.
La candidatura "Icomemparatodos" lleva en el nombre con el que se presenta una declaración de intenciones muy clara. El Colegio es de y para todos los médicos. Y todos los que la componen comparten una misma ilusión, como lo es recuperar la confianza en la institución y lograr que desarrolle todas aquellas iniciativas y acciones que acompañen a sus colegiados en su andadura profesional, sintiéndose parte de un grupo heterogéneo, puesto que las condiciones contractuales o los puestos de desempeño son muy variados, pero a la vez con un sentimiento identitario que refuerce la dignidad de la profesión.
Un Colegio de Médicos no puede moverse al ritmo de intereses externos, ya sea de empresas vinculadas, entidades de diverso tipo ajenas a la medicina, ni sucumbir a la influencia de ningún tipo de ideología, ideario político ni creencia religiosa. Porque el Colegio debe apoyar y acompañar a todos sus colegiados. Respetando la ética médica y el código deontológico debe abordar cada asunto desde una imparcialidad que no deje aparte a nadie, y en la que se tengan en consideración todos los puntos de vista. Quizá quien se sienta incapaz de trabajar desde la neutralidad no debería presentarse a un puesto en el que su cargo es representativo y, por tanto, no puede desempeñarse desde el marco de las propias opiniones individuales.
Curiosamente, a la candidatura "Icomemparatodos", ya sea desde el desconocimiento o desde intenciones perversas, se nos ha encasillado en la izquierda, en la derecha y en el mundo sindical y, por tanto, se nos censura por tener unas supuestas ataduras a las que estaríamos condicionados. Son lecturas ciertamente simplistas, porque la nuestra es una candidatura en la que hay componentes de todo un variado espectro de pensamiento, que, como beneficio añadido, proporcionan un enriquecimiento a la hora de abordar temas. La variedad de opiniones y la discrepancia conforman un campo fértil para trabajar en la diversidad con la que hay que abordar los avances que se van produciendo tanto en la profesión como en la sociedad. Por otra parte, las sinergias en la colaboración y escucha con entidades como sociedades científicas o sindicatos médicos y asociaciones médicas sin ánimo de lucro no supone ningún tipo de condicionamiento, sino que refuerzan la búsqueda de la mejora en el desempeño profesional.
Lamentablemente, la junta directiva actual sí ha dado muestras de tomar posiciones desde algún lado del espectro político. No podemos dejar de recordar el comunicado difundido con ocasión de la huelga de atención primaria, en la que, no lo olvidemos, las reivindicaciones de los médicos de familia y pediatras se encaminaban a poder recuperar una calidad en la asistencia a los madrileños que se ha ido deteriorando con los años. De forma inaudita y sin ningún pudor el Colegio emitió un comunicado alineándose con la Consejería de Sanidad, pretendiendo debilitar y descalificar a quienes debería apoyar. Es cierto que la Atención Primaria no es ni mucho menos relevante para la actual Junta Directiva, como lo demuestra el hecho de que se ha ido restando actividad a la Mesa de AP, o la vergonzosa decisión de la Junta Electoral de no situar ninguna mesa electoral en el ámbito de la atención primaria.
Quedan temas muy importantes por abordar para la profesión. Dar voz a los médicos para conseguir mejoras retributivas, contribuir de forma efectiva al desarrollo profesional, abordar la cotización, duración y remuneración de las guardias; potenciar la formación continuada, la docencia de los MIR, facilitar espacios de encuentro de profesionales, trabajar para evitar y frenar el intrusismo, exigir la evidencia científica como garante del desempeño médico. Perseguir la tolerancia cero hacia las agresiones, abordando el problema desde su base hasta sus consecuencias legales y psicosociales en sinergia con todos los agentes que deban implicarse. Acompañar el proceso de homologación de compañeros extracomunitarios, crear un convenio para las urgencias, resolver la temporalidad, apoyar el reconocimiento del nivel A1+ con todos sus efectos, y seguir acompañando a los médicos jubilados cuando acaban su andadura profesional.
Todo ello a través de una gestión honesta, impecable y transparente, con proporcionalidad y justificación en la implementación de proyectos y abordaje fuera de lo político o de interferencias externas para poner el foco sólo en los intereses de todos los colegiados y colegiadas, sin distinción.
Votemos para que el Colegio de Médicos recupere todo su valor.