La inauguración del Megapuerto de Chancay, un ambicioso proyecto de infraestructura financiado por China, representa un avance clave en la conectividad entre Perú y Asia. Este puerto no solo facilita un enlace directo entre ambos continentes, sino que también promete mejorar la logística y reducir los gastos de transporte, lo que podría reflejarse en una baja de precios en productos importados.
Esta disminución en los costos beneficiaría principalmente a los consumidores peruanos, sobre todo en artículos de uso masivo. Sin embargo, es crucial analizar cómo afectará esto al precio final de los productos.
En diálogo con la Agencia Andina, Javier Guembes, gerente general de Dinámica Costera, habría señalado que la disminución de los costos logísticos se traduciría en precios más bajos para los consumidores. Adicionamente, de los productos de origen chino, se anticipa una mayor disponibilidad de bienes tecnológicos en el mercado peruano debido al establecimiento del puerto.
"Claro que sí [podrían llegar con un menor costo]. Debería de trasladarse [ese beneficio al consumidor final]. No solamente habrían productos provenientes de China más baratos, sino que también habría una mayor oferta de bienes tecnológicos con la entrada en operación del puerto", afirmó.
Guembes destacó que, dado el alto nivel tecnológico de China, el mercado peruano podría diversificar su oferta, especialmente en dispositivos electrónicos, telecomunicaciones y vehículos. Estos productos llegarían en mayores cantidades y a precios más competitivos, según la demanda local. "Además, está proyectado que se ensamblen vehículos eléctricos en Chancay", manifestó.
"Tenemos una cierta cantidad de productos chinos que se manejan con la visión de que sean económicos. Sin embargo, China es un país del primer mundo, tiene una altísima tecnología, hay una oportunidad de diversificar el mercado de manera importante. Podrían llegar más productos con más tecnología, desde aparatos electrónicos, telecomunicaciones y vehículos. Podrían llegar con menor precio y en mayor cantidad. Es cuestión ahora de mover un poco el mercado para ver dónde se ubicarían estos productos", acotó.
El gerente también resaltó que, como un puerto de clase mundial, Chancay optimizará todos sus procesos logísticos. Desde el manejo de la carga con grúas especializadas hasta el traslado eficiente de contenedores a los camiones, se busca maximizar la eficiencia en cada etapa. Esta organización permitirá una mayor fluidez en el transporte de mercancías y evitará interrupciones.
"Va a ser un puerto de primer nivel, de categoría mundial. Todos los procesos estarán sistematizados, desde el manejo de la carga con las grúas que van a sacar el material del barco y ponerlo en el puerto. Se van a optimizar todos los procesos, ellos van a tener también un antepuerto donde no va a haber interrupciones para el traslado de la mercadería, TEU o contenedores, a los camiones", comentó.
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"Igual será a la inversa. Estos países van a traer su carga, esta se va a quedar en Chancay y de ahí van a salir los grandes barcos [hacia el Asia]", indicó.
El Megapuerto de Chancay impactará positivamente en los costos de importación al optimizar el proceso logístico en diversas áreas. La automatización de las operaciones portuarias mejorará la eficiencia en el manejo de mercancías, reduce tiempos y costos operativos.
La creación de un antepuerto facilitará un flujo continuo de productos hacia los centros de distribución, eliminará demoras y mejorará la rapidez en la entrega. Sumado a eso, la mayor capacidad de los buques y la mejora de las rutas de transporte marítimo contribuirán a la reducción de los costos de fletes, lo que disminuirá los costos generales de importación.
