En el minuto 34 del partido, justo tras marcar Vitor Roque de cabeza el 0-1 en el marcador del Villarreal - Betis se produjo una falta en el centro del campo que desató una enorme polémica dado que condiciona el encuentro para los de Manuel Pellegrini con una hora de juego por delante. Y es que Chimy Ávila frenó una arrancada de Álex Baena en la medular con una falta clara que merecía tarjeta amarilla pero Cuadra Fernández, árbitro del encuentro, decidió que era roja directa. Una elección escandalosa dado que no era acorde a lo visto sobre el terreno de juego y afectaba de manera grave a los verdiblancos. El argentino se quedó muy sorprendido porque su falta no fue dura, sino una zancadilla y el colegiado balear se justificaba ante los jugadores béticos que le pedían que fuera al VAR. En el videoarbitraje está Pizarro Gómez, que a pesar de los requerimientos del banquillo bético, no avisó de su error a Cuadra Fernández y el Betis se quedó con diez. Pellegrini fue amonestado por protestar la acción que ha hecho que el Betis se reconfigure en el campo con Vitor Roque más abierto ahora a la derecha y jugando con diez ante un rival directo y después del esfuerzo del jueves en Moldavia.