Este viernes, 13 de diciembre, el Comité de Apelación reiteró la sanción impuesta a Hansi Flick durante el partido frente al Betis (2-2) en el Benito Villamarín, por la jornada 16 de LaLiga EA Sports. Durante el encuentro, el entrenador alemán vio la tarjeta roja "por salir del área técnica gritando y gesticulando, protestando una de mis decisiones", así lo describió el colegiado Alejandro Muñiz Ruiz.
"No he dicho nada a nadie, sólo ha sido mi reacción. Tardó mucho en decidir si era penalti o no. Si necesitas tanto tiempo, puede ser duda. No estoy orgulloso. No me había pasado nunca. Me he enfadado conmigo mismo, no contra nadie", comentó Flick tras el encuentro. Sin embargo y pese al recurso que levantó el equipo culé, se ratificó la decisión de suspenderle por dos partidos en la competición doméstica, por lo que no podrá estar mañana frente al Leganés ni el 21 de diciembre ante el Atlético de Madrid.
En su lugar, quien guiará desde el banquillo será su asistente, Marcus Sorg. Uno de los hombres de confianza del entrenador alemán y a quien generalmente le delega varias tareas importantes, además, es una de las personas más cercanas a él. "Marcus, mi asistente, ha hecho un buen trabajo. Marcamos un gol con él", así le demostró su respaldo Flick.
Antes de llegar al FC Barcelona para sentarse en el banquillo como asistente de Hansi Flick, estuvo trabajando en la selección germana también siendo la mano derecha de diferentes entrenadores. Fue precisamente ahí en donde coincidió con el actual preparador del Barça (25 partidos), además de con Joachim Low (71) y Horst Hrubesch (6).
Sorg nació en Ulm (Alemania) hace 58 años, de profesión es ingeniero y cuenta con una amplia trayectoria en el fútbol. También, tuvo una carrera como jugador (mediapunta y delantero) y vistió los colores de algunos equipos de su país como el TSF Ditzingen o el VfR Mannheim, hasta 1999.
Además, tiene experiencia dirigiendo clubes como al Stuttgarter Kickers II, FC Heidenheim, SSV Ulm, TSF Ditzingen y SC Friburgo. Una de sus grandes cualidades es potenciar a las futuras promesas y lo demostró cuando se hizo cargo como primer técnico del sub-17 del Bayern de Múnich y del sub-19 de la selección alemana, con la que ganó el europeo en 2014.
Sin embargo, el llevar a más a los juveniles no es lo único que comparte con Flick. Es metódico, riguroso, disciplinado, exigente y responsable, mismas cualidades que el actual entrenador culé ostenta y que han sido claves en la conformación de un cuerpo técnico sólido.