Tijuana.- En Mexicali, Baja California, una menor de cuatro años de edad de nombre Kimberly fue declarada con daño cerebral tras haber sufrido una intoxicación por fentanilo.
La niña fue ingresada al Hospital General de Mexicali el pasado 22 de octubre, momento en el que se le diagnosticó el envenenamiento con el opioide sintético.
Al sospechar que la madre fue la responsable del daño a su hija, el DIF Baja California puso a disposición de unos familiares a la menor, los cuales fueron designados como tutores; no obstante, Kimberly volvió a recaer presentando convulsiones.
Lo anterior le provocó muerte cerebral, manteniéndola internada y bajo supervisión médica en el Hospital General de Mexicali.
“Se pensó primero que fueron metanfetaminas, después se determinó que era por opioides, la niña se recuperó afortunadamente tuvo una adecuada evolución en aquel momento”, detalló Adrián Medina Amarillas, secretario de salud de Baja California.
“Después regresó en crisis convulsiva, se decía que llevaba varios minutos en un estatus de ese tipo, cuando se encontró la crisis convulsiva se vio que la niña no tenía capacidad respiratoria; está entubada y con cuidados especiales, al requerir apoyo ventilatorio en automático se designa como un paciente crítico”, añadió.
Hasta el momento no hay detenidos por este caso de omisión de cuidados de una menor de edad, así como por violencia y maltrato familiar.
Este hecho se suma al de Karla, niña que también radicaba en Mexicali y tenía al igual que Kimberly, cuatro años de edad.
La menor de edad fue presuntamente víctima de múltiples actos de violencia como golpes e incluso quemaduras de cigarro por parte de su madre, Vanessa “N”, de 21 años de edad, y su padrastro, Luis “N”, de 27 años de edad.
A causa del daño recibido se le internó en el Hospital General de Mexicali el pasado seis de diciembre, donde se mantuvo bajo tratamiento; no obstante, el 10 de diciembre perdió la vida.
De ser efectivamente los responsables de la muerte la madre y el padrastro, se buscará otorgarles una sentencia ejemplar para que no se vuelva a suscitar un hecho como ese, de acuerdo con las palabras del fiscal central del Estado, Rafael Orozco.
Por su parte, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar, se pronunció en contra de los delitos que afectan a la niñez y juventud de la entidad.
“Es un hecho sumamente doloroso para toda la sociedad bajacaliforniana; desde el viernes que ingresó la niña al hospital la Fiscalía detuvo a quienes pudieran ser los presuntos agresores, su madre y padrastro”, manifestó Del Pilar.
