(*) por Rossana Dudziak, coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas en el Perú.
Los derechos humanos son una luz de esperanza y un camino hacia soluciones en favor de la humanidad.
No obstante, como advierte el Secretario General de las Naciones Unidas, los derechos humanos enfrentan ataques constantes en la actualidad, afectados por factores como la pobreza, las desigualdades, los conflictos, el autoritarismo y el discurso de odio, entre otras amenazas globales.
Defender los derechos humanos no es solo hacer frente a las injusticias actuales, sino volver a las sociedades más justas y empoderar a los grupos marginados. Al promover los derechos humanos, creamos un mundo más justo para todas las personas.
Los derechos humanos actúan como una fuerza preventiva, protectora y transformadora para el bien común. Son el hilo conductor que nos une para fomentar la paz y la estabilidad.
El Pacto para el Futuro, adoptado por los Estados Miembros de las Naciones Unidas en septiembre de 2024, reforzó el compromiso del mundo con la Declaración Universal de Derechos Humanos. Setenta y seis años después de su adopción, la Declaración Universal sigue siendo un testimonio de nuestros valores compartidos y una hoja de ruta para promover la libertad, la justicia y la paz. Su mensaje resuena hoy más que nunca, mientras enfrentamos complejos desafíos globales.
El tema del Día de los Derechos Humanos de este año es “Nuestros derechos, nuestro futuro, ya”. Este lema destaca la urgencia de actuar y nos llama a aprovechar el poder transformador de los derechos humanos para combatir las desigualdades, abordar la discriminación y defender la justicia frente a amenazas emergentes para la humanidad, como el cambio climático, los avances tecnológicos y el autoritarismo creciente.
Los derechos humanos no son ideales aislados; están profundamente entrelazados con la paz y el desarrollo sostenible. Protegen a los más vulnerables, garantizan la rendición de cuentas y empoderan a cada persona para contribuir a una sociedad resiliente y cohesionada.
En todo el mundo, las Naciones Unidas trabaja incansablemente para promover y proteger los derechos humanos. Desde el fortalecimiento de los marcos legales internacionales hasta el apoyo directo en terreno, las agencias, fondos y programas de las Naciones Unidas colaboran para que los derechos humanos sean una realidad tangible para todos.
En el terreno, el Sistema de Naciones Unidas trabaja estrechamente con los gobiernos para fortalecer capacidades nacionales, apoyar reformas y fomentar la protección de los derechos humanos. A través de programas conjuntos, asistencia técnica y cooperación, la ONU contribuye a garantizar que los derechos humanos se integren en las leyes, políticas y acciones públicas, promoviendo sociedades más justas, inclusivas y resilientes.
Con motivo de la conmemoración del Día de los Derechos Humanos, renovemos nuestro compromiso de promover y respetar los derechos humanos, no solo como una obligación legal o moral, sino como una necesidad práctica para construir un mundo más justo e inclusivo. Juntos, debemos actuar para contrarrestar los estereotipos negativos, abordar las injusticias y hacer valer los derechos humanos para todas las personas.
Ante la adversidad, los derechos humanos nos recuerdan nuestra humanidad compartida. Nos inspiran a soñar con un mundo donde cada persona sea libre, igual y esté empoderada para llevar una vida digna, sin dejar a nadie atrás.
