¡Cuida a tus mascotas? Los fuegos artificiales son parte esencial de las celebraciones en Perú y el mundo, desde Navidad hasta Año Nuevo. Sin embargo, mientras que los humanos disfrutan de los espectáculos luminosos, los animales perciben estos eventos como una amenaza. Para perros, gatos y otras mascotas, el estruendo y las luces pueden causarles múltiples males.
Ante esta constante premisa anual, los expertos advierten que el ruido extremo puede incluso resultar fatal en casos severos de pánico, entre otros males que pueden poner en riesgo la salud e incluso la vida de los más engreídos del hogar. ¿Qué medidas tomar? ¿Por qué es tan peligroso para las mascotas?
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De acuerdo a la veterinaria Jessy Alfonso en una previa entrevista, el impacto del ruido es devastador para los animales debido a su oído sensible. Los perros detectan sonidos en rangos de hasta 65.000 Hz, mucho más amplios que los 20.000 Hz percibidos por los humanos. Esta sensibilidad hace que el estruendo de los fuegos artificiales sea intolerable para ellos, y se le suma que podrían "afectar directamente al temperamento de la mascota" según Alfonso.
Los gatos, aunque suelen ser más independientes que los perros, no están exentos de los efectos negativos de la pirotecnia. Su oído agudo los hace vulnerables al estruendo, lo que puede llevarlos a refugiarse en lugares peligrosos como balcones o techos. Según Jessy Alfonso, es esencial mantenerse en espacios seguros y supervisados, ya que tienden a esconderse silenciosamente y mostrar signos de miedo solo de manera sutil, como erizar el pelaje o evitar el contacto.
Los fuegos artificiales alcanzan hasta 190 decibelios, según datos de la OMS. Esto supera con creces el límite de 70 decibelios que ya puede dañar la audición humana. Para las mascotas, este nivel de ruido no solo provoca estrés, sino también daños irreversibles en sus oídos. En casos severos, las mascotas pueden manifestar síntomas de ansiedad como taquicardia, salivación excesiva, temblores e incluso dificultades respiratorias. Estos episodios, si no se gestionan adecuadamente, pueden poner en riesgo su vida.
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No solo los perros y los gatos sufren los efectos de la pirotecnia. Aves urbanas como palomas y gorriones también experimentan taquicardia y desorientación debido al ruido, según la veterinaria Alfonso. En Roma, un estudio reveló la muerte de cientos de aves tras celebraciones de Año Nuevo.
Además, los caballos, frecuentemente presentes en áreas rurales y urbanas, también son víctimas del estrés. La Sociedad Británica de Caballos estima que el 79% de ellos experimenta ansiedad severa, mientras que el 26% se lesiona al intentar huir de los sonidos.
Evitar pasear a tu mascota inmediatamente después de las celebraciones es crucial. La doctora Alfonso advierte que los residuos tóxicos de los fuegos artificiales, como químicos y fragmentos de explosivos, pueden permanecer en las calles hasta por tres días, lo que representaría un peligro para su salud.
Esperar un par de días antes de sacar a tu mascota a caminar reducirá el riesgo de contacto con sustancias dañinas. Mientras tanto, asegúrese de limpiar sus espacios y evitar que exploren áreas potencialmente contaminadas.