HSBC lleva a cabo una revisión de su negocio de banca minorista fuera de Reino Unido y Hong Kong, una medida que puede reducir sustancialmente sus operaciones en países como México, en su búsqueda de mayores recortes de costos.El banco analiza lugares fuera de sus mercados principales donde pueda reducir su presencia en el mercado de consumo y enfocarse en clientes premiermás ricos, según personas familiarizadas con las discusiones.Uno de los mercados que se examina es México, un país en el que HSBC entró hace más de dos décadas, pero donde tiene una historia complicada, que incluye una multa de más de 2 mil millones de dólares por parte de las autoridades estadunidenses en 2012 por fallas que permitieron a los cárteles del narcotráfico lavar cientos de millones de dólares.Douglas Flint, presidente de HSBC en ese momento, dijo que el banco recibió una lección de “humildad” y que el consejo de administración asumió toda la responsabilidad por las fallas.Desde entonces, HSBC—que llegó al país a través de su adquisición de Grupo Financiero Bital en 2002—logró que sus depósitos en México aumentaran a casi 30 mil millones de dólares, lo que lo convierte en el noveno mercado más grande del banco con costos operativos de mil 800 millones de dólares.“Todo se reduce a la escala del negocio de consumo en México”, dijo una de las personas cercanas a la revisión. “Intentas reducir las filas de tu negocio minorista y concentrarte en el cliente premier que también tiene una cartera en patrimonial. En México, HSBC no tiene una escala competitiva”.Aún no se toma una decisión, pero un repliegue será la última señal de reducción de un banco que se embarcó en una fiebre de expansión global a principios de los 2000 antes de volver a enfocarse en sus negocios principales en Hong Kong y Reino Unido, así como en su oferta de banca patrimonial.HSBC vendió su negocio canadiense a Royal Bank of Canada por 10 mil millones de dólares hace dos años, con ventas similares de operaciones de consumo que generaban pérdidas en Francia y EU.El banco no considera retirarse totalmente de México, pero sí buscará reducir su presencia minorista, donde tiene dificultades para competir con rivales más grandes como BBVA y Banamex.HSBC también hace una revisión de su posición en países como Malasia e Indonesia, donde los ejecutivos creen que se beneficiarámás si se concentran en la banca de clientes principales en lugar de en los del mercado masivo.El nuevo director ejecutivo de HSBC, Georges Elhedery, que asumió el mando en septiembre, está interesado en concentrarse en los clientes de la categoría premierdel banco, así como en la gestión patrimonial, ya que busca optimizar las operaciones del banco y reducir los costos, dijo una de las personas.Los altos ejecutivos del banco trabajan para alcanzar un objetivo de hasta 500 millones de dólares en ahorros anuales a partir de los recortes de puestos de trabajo ya anunciados, según dos personas con conocimiento del asunto, quienes advirtieron que la cifra puede cambiar.Entre las salidas recientes se encuentran Nuno Matos, que dirigía el negocio de banca personal y patrimonial de HSBC;Annabel Spring, directora global de banca privada y patrimonial, y Céline Herweijer, directora de sostenibilidad del grupo.Elhedery también consolidó puestos de alto nivel que se traslapan en la banca comercial y la unidad de banca global y mercados, como parte de una amplia reestructuración de las operaciones del banco.También elimina el título de “gerente general”, una designación que otorga un estatus mayor a algunos de los más altos ejecutivos del banco y brinda mejores beneficios.El principal rival internacional de HSBC, Citigroup, está en proceso de salir de su negocio mexicano de banca de consumo, al tiempo que también se repliega de una etapa anterior de expansión global.HSBC no quiso hacer comentarios al respecto.