En un logro sin precedentes en la actual legislatura, el Senado ha aprobado por unanimidad una moción que insta al Gobierno a reconocer el Derecho al Acompañamiento Afectivo (DA+). Esta iniciativa busca garantizar que toda persona tenga derecho a relacionarse y recibir apoyo afectivo, promoviendo medidas concretas para combatir el aislamiento social y la soledad no deseada.
La moción, debatida el pasado 3 de diciembre en la Comisión de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, incluye el compromiso del Gobierno de trabajar en coordinación con entidades sociales, comunidades autónomas y ayuntamientos para desarrollar programas específicos con financiación adecuada.
El proyecto DA+ ha sido impulsado por la asociación Som Base, una organización de voluntarios políticos comprometida con transformar la acción social en políticas efectivas. Desde 2019, Som Base lidera la promoción de este derecho a nivel local, nacional e internacional, con el objetivo de que sea reconocido como un Derecho Humano Universal por la ONU.
“Este es un paso histórico hacia una sociedad más justa y afectiva. El DA+ no solo combate la soledad, sino que refuerza nuestra esencia como seres humanos: la necesidad de conectar y cuidar a los demás,” afirma Mau Blancafort, abogado y coordinador de Som Base.
La aprobación en el Senado es el resultado de años de trabajo constante, que incluye:
"El consenso político es clave. La soledad no deseada afecta a millones de personas, y el DA+ es un derecho que trasciende ideologías y que es fundamental para dotar de fundamento jurídico a las políticas sociales que garanticen su ejercicio. Estamos demostrando que juntos podemos construir una sociedad más solidaria", explica Blancafort.
Con el respaldo unánime en el ámbito estatal, Som Base ya trabaja en la internacionalización del DA+, buscando su reconocimiento por parte del Parlamento Europeo como paso previo para llegar a la ONU. En paralelo, se avanza en la redacción de un plan de acción y una normativa que garantice su aplicación.
Som Base es una asociación nacida en Barcelona en 2017 con el objetivo de influir en las políticas públicas para mejorar la sociedad. Su trabajo se basa en principios de cooperación, aconfesional, apartidista y vocación de servicio. Un grupo de voluntarios, Som Base, impulsa el reconocimiento de un nuevo Derecho Humano entre las instituciones, como paso previo para que sea reconocido como un Derecho Humano Universal a través de la ONU, y pretende obtener el consenso de todos los grupos políticos y sociales.
