A semanas de haber lanzado la licitación nacional e internacional para la concesión de la Vía Navegable Troncal, mejor conocida como hidrovía, el Gobierno Nacional volvió a modificar algunas de sus condiciones a raíz de sugerencias hechas formalmente por las empresas de dragado, los privados que comercian y de actores políticos involucrados por el trazado de la vía fluvial.
Este miércoles se publicó en el Boletín Oficial la Disposición 36/2024 de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, a cargo de Iñaki Arreseygor, que modifica, centralmente, tres componentes del pliego de la licitación de la hidrovía. Tal y como se expresa explícitamente, se tomaron sugerencias que derivaron en "mejoras en diferentes artículos de las Especificaciones Técnicas".
Según pudo saber El Cronista de fuentes oficiales, el objetivo fue extender el plazo para terminar de aplicar a la licitación, agregar mayor cantidad de vías navegables a ser mantenidas e incrementar la profundidad del dragado de todas ellas.
En el lanzamiento original hecho por la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, se estableció que el cierre de las presentaciones de ofertas fuera el 29 de enero de 2025.
Esto, finalmente, se terminó corriendo para el 12 de febrero, para que las empresas que están interesadas en ofertas puedan evaluar de mejor manera las nuevas condiciones que iba a insertar el Gobierno.
Disposición 36/24 by Cronista.com on Scribd
El proyecto original abarcaba desde el kilómetro 1238 del Río Paraná hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales del Río de la Plata. Como una de las operaciones, incluía el dragado y mantenimiento del canal Paraná de Las Palmas.
La nueva circular modificatoria que firmó la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables agregó otros dos tramos más para que entrarán en la responsabilidad de la compañía que gane la licitación: el Paraná Guazú y el Pasaje Talavera.
Los nuevos trazados que van a ser considerados en la concesión de la hidrovía.
Ambos habían sido solicitados por el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, una de las provincias por las que pasa la VNT. "No pueden trabajar en esta cuestión sin el asesoramiento de las provincias", había dicho el dirigente durante el acto de firma del Tratado de Integración Regional el mes pasado. La intención es desarrollar el sur productivo de la provincia.
La concesión del Gobierno también se enmarca ante el evento dado a conocer por Perfil sobre un anuncio de la Fundación Pensar (think tank del PRO) para el martes 17 de diciembre, que iba a englobar a legisladores y técnicos especialistas en ingeniería fluvial de las provincias de Entre Ríos, Santa Fe y Corrientes; la primera gobernada por el PRO y las otros dos por la Unión Cívica Radical.
Se trata de un asunto que es mirado de cerca por el expresidente Mauricio Macri y en la Casa Rosada se interpretó como una "apurada" contra el Gobierno por las condiciones iniciales del pliego.
Quienes también participaron del proceso de sugerencias del pliego inicial fueron varios de los privados que participan en el negocio comercial a través de la vía fluvial, como el sector cerealero de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y del Centro de Exportadores de Cereales (CEC): incrementar los pies de dragado de las arterias.
El dragado consiste en el retiro de sedimentos ubicados en el lecho de un curso de agua y es fundamental para asegurar las condiciones de navegabilidad de las embarcaciones. A mayor profundidad, más capacidad pueden llevar los buques cargueros. De igual manera, podrán circular buques de mayor envergadura.
"Tanto los privados como las empresas de dragado consideran que podría haber un equilibrio entre lo que cuesta hacer una vía más profunda y los mayores peajes que podrían cobrar estas últimas al tener buques con mayor cantidad de carga circulando", afirman desde el Gobierno.
Con buques con mayor cantidad de carga, la empresa que gane la licitación podría cobrar una tarifa algo más cara
Lo que se estableció es que el tramo de Paraná de las Palmas pase de una profundidad de 42 pies a 44 pies. Aun así, primero deberán hacerse estudios de impacto ambiental de un año de duración que evalúe la factibilidad de poder realizar esas obras de mayor profundidad.
En cuanto al Paraná Brazo, el Guazú y el Pasaje Talavera, se pasará de 28 pies a 36 pies. "Hoy no tiene profundidad garantizadas. Se hicieron batimetrías [estudios de las profundidades de la vía navegable] y está balizado, pero depende de las mareas", indicó a El Cronista un funcionario que participó en esas negociaciones.
