La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una advertencia que no puede ser ignorada: un nuevo virus transmitido por mosquitos está avanzando rápidamente en América, dejando miles de contagios a su paso.
La enfermedad, conocida como virus de Oropouche, ya se cobró vidas y amenaza con extenderse aún más si no se toman medidas urgentes.
En Brasil, epicentro del brote, el impacto fue devastador, con miles de casos confirmados y pérdidas humanas. Mientras tanto, otros países como Perú y Cuba lidian con el temor de que el virus continúe expandiéndose.
El virus de Oropouche es transmitido por los mosquitos Culicoides paraensis y Culex quinquefasciatus.
De acuerdo con el sitio Wired, aunque no se contagia entre personas, sus síntomas, que aparecen entre cuatro y ocho días después de la picadura, son similares a los del dengue:
En casos graves, la infección puede derivar en meningitis o encefalitis. Sin embargo, no existe un tratamiento antiviral específico ni una vacuna disponible.
La OMS recomienda adoptar las siguientes medidas para prevenir el contagio:
El cambio climático y las alteraciones ambientales, como la deforestación, favorecieron la expansión del virus más allá de su zona endémica, aumentando su alcance en el continente. La OMS insta a los países a trabajar en conjunto para abordar este desafío sanitario emergente.
La OMS documentó la expansión del virus en diez países, con Brasil como el más afectado.
Hasta el momento, este país registró 9563 casos y dos muertes relacionadas, mientras que otros países como Perú, Cuba, Bolivia y Colombia presentan cifras menores, aunque preocupantes.
Además, se han identificado casos importados en Estados Unidos, Canadá e Islas Caimán.
El impacto en la región incluye: