Rosa María Álvarez ha hablado en directo con Cristina Pardo e Iñaki López en ' Más Vale Tarde ' (La Sexta) para contar cómo fue su encuentro, el cara a cara, con la Reina Letizia. Tuvo lugar ayer, mientras se desarrollaba la misa en la Catedral de Valencia en memoria de los fallecidos y afectados por la DANA. Esta ciudadana valenciana, que está entre quienes se han visto afectados por las riadas y las lluvias, tuvo unos minutos con la Reina Letizia y ha explicado a cámara que fue más significativo lo que no dijo y le transmitió con gestos y miradas que lo que dijo, o podía decir… Rosa María estaba entre esa ciudadanía que necesitaba respuestas a lo sucedido y a esa ayuda que no termina de llegar. Según ha referido a Pardo y López, «yo no buscaba consuelo, sino que interactuara con nosotros, de persona a persona. Así, cuando se acercó la Reina Letizia a ella, no dudó en expresarle su malestar y cuánto están sufriendo con lo ocurrido, por las consecuencias y con la falta de apoyos que hay para personas como ella y como su familia. Ante esto, ¿cómo respondió su majestad? Rosa María Álvarez ha narrado que si bien no le contestó, sus gestos hablaban por sí solos, así como sus ademanes y el rostro compungido. Le dijo: «Si yo pudiera hablar…». Y ella lo comprendió perfectamente: «Entiendo de verdad que no pudiese hablar». Los Reyes , tanto Felipe VI como doña Letizia, se mostraron del lado del pueblo. Según captaron las imágenes, familiares de víctimas mortales de este desastre natural rompieron a llorar con ellos y se mostraba cómo buscaban en ellos algo de empatía y consuelo. El rey, de hecho, se llevó la mano al pecho al terminar el funeral y fue directo a donde se encontraban estas personas para transmitirles su afecto y apoyo. Por su parte, la Reina Letizia hacía lo mismo, abrazándooslas a los ciudadanos con caras compungidas y conteniendo el llanto que se encontró en el templo donde se llevó a cabo este homenaje. Iñaki López y Cristina Pardo han preguntado a Rosa María Álvarez qué pide ella a las autoridades. Esta ha aprovechado para referir primero su «indignación sobre todo ante los políticos, especialmente los de aquí, los de la Comunidad Valenciana, porque siento que ayer sobraban allí». Por otro lado, ha querido decirles que no quiere que ellos sean «moneda de cambio, que no nos utilicen y nos ayuden, que es lo que verdaderamente hace falta».
