CCOO, UGT y la Confederación de Empresarios de Albacete (FEDA) han firmado este martes, en el Teatro Circo , un pacto para demandar al Gobierno el restablecimiento y la mejora de las conexiones ferroviarias de la provincia albaceteña que llevan reduciéndose desde la pandemia. Piden la reapertura inmediata de la línea 320 Chinchilla-Cartagena, la electrificación de todo el trazado, la instalación de nuevos sistemas de control de circulación para permitir trenes de velocidades de 200 kilómetros/hora, la inclusión de dicha línea en la Red Transeuropea de Mercancías, el restablecimiento de los trenes regionales con Murcia, una mesa de trabajo para contemplar las necesidades de la provincia, la reapertura de las estaciones de Tobarra y Pozo Cañada y el mantenimiento de la de Hellín. Sindicatos y empresarios animan a las administraciones locales y provinciales, con las que se reunirán en los próximos días, a sumarse al pacto para movilizar lo antes posible al Ministerio de Transportes y llegar a una solución. El secretario provincial de UGT, Francisco Javier González, ha defendido el ferrocarril como «fundamental en la vertebración de los territorios y la lucha contra la despoblación, especialmente para una ciudad de paso como es Albacete». Asimismo, recuerda que la reapertura de la línea Chinchilla-Cartagena estaba estipulada para enero de este año y aún sigue «sin perspectiva de terminarse» debido al soterramiento del AVE. «Es un servicio esencial para una población de uno 700.000 habitantes entre la Región de Murcia y la provincia de Albacete y por ello representa un trazado de interés general y una infraestructura estratégica de cohesión social», ha comentado. Mientras, la secretaria provincial de CCOO, Carmen Juste, ha afirmado que se ha «avanzado muy poco» en el trazado ferroviario pese a la resolución aprobada en 2023 en el Ayuntamiento de Albacete en defensa del ferrocarril. «Se han perdido muchos trenes de la red convencional con la llegada del AVE», ha asegurado, añadiendo que e n 2010 «había 14 trenes diarios por sentido con Valencia» , pero ahora, y tras la reducción durante la pandemia, el número de trenes convencionales ha caído hasta hacer «imposible viajar a diario porque por la tarde no hay trenes». Aun así, Juste expone que sigue habiendo demanda, ya que el Instituto Nacional de Estadística registró 370.000 viajes en vehículos particulares entre las dos ciudades en 2023. Además, CCOO lamenta que, en la actualidad, «los billetes de Renfe-Adif son demasiado altos para el ciudadano medio». Por su parte, el presidente de FEDA, Artemio Pérez, considera «esencial» para los empresarios de Albacete una buena comunicación ferroviaria con el Levante, donde «más del 40% de nuestras relaciones comerciales dependen de Valencia y casi el 20% son con Murcia» . «Estamos yendo hacia atrás, incumpliendo las exigencias de la Unión Europea de reforzar la red de trenes que es, además, más ecológica y rentable», ha alertado. Finalmente, Pérez ha comentado que los sectores más perjudicados son las exportaciones y el agroalimentario, pues «el puerto de Valencia es una salida al mercado vital para nuestra región».
