Toño Sanchís no podía terminar el año de mejor forma. El documental '900 días sin Anabel', en Netflix, ha conseguido posicionarse como uno de los más vistos, a nivel mundial, de la plataforma. Este, que consta de tres capítulos, versa sobre el secuestro y asesinato de Anabel Segura, una joven que vivía en la exclusiva urbanización de La Morajela , en Madrid, y a la que raptaron para pedir un rescate millonario a la familia. Terminaron matándola. El exrepresentante de Belén Esteban ha tenido un papel importante ya que, como indican en los episodios, es uno de sus Productores Ejecutivos. Una labor que ha realizado a través de Loveo Audiovisual, una sociedad limitada cuyo objeto social es «la producción, comercialización y emisión de programas en televisión; producción, coproducción, rodaje, distribución y comercialización de películas cinematográficas». Su éxito como productor llega después de su descenso como representante de personajes públicos. Pasó de estar al lado de los colaboradores televisivos más populares - Ylenia Padilla, Kiko Matamoros, Mila Ximénez y Terelu Campos , entre ellos- a que una gran parte decidieran prescindir de sus servicios tras el litigio que protagonizó con Belén Esteban, del que la televisiva salió victoriosa. Toño Sanchís y la de San Blas estaban muy unidos. La tertuliana no daba un paso sin que él lo supiera. Incluso su nombre figuraba en su testamento. Sin embargo, en 2015, una reclamación de Hacienda dinamitó su relación amistosa y profesional. La colaboradora de 'Ni que fuéramos shhh' debía al fisco cerca de 600.000 euros por varias irregularidades, algo que le pilló por sorpresa puesto que ella pensaba que estaba al corriente. Aunque lo peor llegó cuando quiso hacer frente a la deuda y se percató que no tenía el suficiente dinero para hacerlo. Belén Esteban, como ha confesado en alguna ocasión, no estaba al corriente del dinero que había ganado por los trabajos realizados. No conocía ni el montante que tenía en el banco. En aquel momento, según explicó, era Toño Sanchís el que se ocupaba de sus asuntos económicos. Este suceso motivó que abriera una investigación para conocer la razón por la que no tenía dinero pese a haber realizado innumerables colaboraciones televisivas, campañas publicitarias y entrevistas. Fue en ese momento cuando se dio cuenta de que el representante había pasado de cobrar un 20% por su labor de representación a un 30% sin que esa modificación quedase reflejada en un contrato escrito -él defendió que fue un acuerdo verbal-. También recopiló facturas y documentación y se encontró, según contó, con que hubo trabajos por los que no cobró nada o mucho menos de lo pactado. La televisiva aseguró, durante una entrevista en el 'Deluxe', que no había cobrado parte de las galas de 'Más que baile', programa que ganó. Tampoco vio un euro de 'Ambiciones y reflexiones', su biografía, con la que consiguió vender cerca de 60.000 ejemplares. En esa ocasión, Belén Esteban, confiando en sus intenciones y siempre según su versión, firmó un contrato sin haberlo leído en el que le cedía los derechos de autor a a él. Así, con todo esto, Belén Esteban tomó acciones legales contra Toño Sanchís para que le devolviera el dinero que se había quedado. Finalmente, la Justicia dio la razón a la colaboradora y fue condenado a pagarle unos 600.000 euros aproximadamente -lo que ella pudo demostrar-. Después de ganar el pleito, Toño Sanchís se declaró insolvente y Belén Esteban recurrió a embargar los bienes del que fue su mano derecha para que mermase la deuda. Así, su vivienda, ubicada en Villanueva del Pardillo, en Madrid, salió a subasta. Finalmente, se la quedó la de San Blas, que pujó por ella, y la vendió. Aún así, como deslizó hace unas semanas en 'Ni que fuéramos shhh', el madrileño le debe cerca de 400.000 euros. Y no está dispuesta a perderlos. «Me alegro de que estés trabajando tanto para pagarme lo que me debes aparte de las costas, que no me has pagado nada de las costas y los intereses. Lo único que espero que como está grabado lo que trabajas, lo estés facturando a tu nombre y a tu empresa, que no sea supuestamente con otras personas». Estas palabras surgieron después de que él admitiera, en el pódcast de Sr. Wolf, que estaba ejerciendo de productor: «Desde el Sapo 1, no he parado de producir. He hecho varios proyectos y en breve presentaremos otro que se promocionará a nivel mundial -referencia al documental de Anabel Segura-. Ese es el mayor reconocimiento, me llena de orgullo». ABC se ha puesto en contacto con Paredes y Asociados Abogados para conocer los pasos que podría llevar a cabo Belén Esteban para cobrar parte de esa deuda ahora que el madrileño ha reconocido que está trabajando. Señalar que Toño Sanchís es el Presidente y Consejero Delegado de Loveo Audiovisual, sociedad limitada que se ha encargado de la producción del documental de Netflix, cuya constitución se hizo en julio de 2022. «Si yo fuera el encargado de sus intereses legales, utilizaría la teoría de levantamiento de velo con la intención de que se indagara cómo está constituida esa S. L. y las participaciones que tiene Toño Sanchís», explica el abogado Alfredo Arrién Paredes . «Puede ser el Presidente y el Consejero Delegado pero no ser accionista ni apoderado. Una S. L. permite varias figuras. Lo que tienen que investigar es si las figuras en las que participa una persona con una S. L. están encaminadas a proteger el patrimonio de la persona física». Pero no solo eso, el letrado presentaría «una querella» por presunta «insolvencia punible». La guerra judicial entre Belén Esteban y Toño Sanchís parece estar muy lejos de terminar. Y no solo por el dinero que el productor le debe a la de San Blas. En 2025, está previsto que se celebre un nuevo juicio entre ellos después de que la tertuliana decidiera llevar el caso al ámbito penal. «Voy a ir contra él y contra la entidad bancaria. Este señor tenía el control de unas cuentas que se han abierto con firmas falsificadas. Hasta seis firmas, mías y de mi hermano. ¿Quién las ha falsificado? ¿Por qué él tenía cuentas que yo no sabía y con claves de acceso? No sé si las ha falsificado él, pero que se ha beneficiado, eso seguro. Y de nuevo será la Justicia quien lo determine. Lo que tenga que ser será», expresó, tras ganar en lo civil, en conversación con la revista 'Semana'. Y es que, según dijo la abogada Montse Suárez en el 'Deluxe' cuando Belén Esteban anunció que iría contra él por lo penal, podría enfrentarse a más de 10 años de prisión por los supuestos delitos de desobediencia a la autoridad, de falsedad documental, de administración desleal y de abuso de superioridad. ABC se ha puesto en contacto con Toño Sanchís para conocer, de primera mano, cómo afronta este pleito, hablar sobre la deuda y de sus proyectos profesionales, pero se ha negado a comentar nada al respecto.
