El Ministerio de Salud de la Nación confirmó que, a partir del 1 de enero de 2025, las recetas médicas en papel serán reemplazadas completamente por recetas electrónicas. Esto se estableció en la Resolución 5744/2024 publicada recientemente en el Boletín Oficial.
Esta medida busca modernizar el sistema con el que se prescriben los medicamentos, eliminar irregularidades y garantizar una mayor transparencia en el ecosistema de salud digital.
Hasta el 31 de diciembre, las recetas emitidas en papel serán válidas dentro de su período de vigencia habitual, hasta que se adapten a los nuevos estándares establecidos en el Registro Nacional de Plataformas Digitales Sanitarias.
Sin embargo, se mantendrán algunas excepciones para zonas sin conectividad o de difícil acceso, donde se permitirá continuar utilizando el formato en papel.
Esta medida se estableció por medio de la Resolución 5744/2024
A través de su sitio web, el Ministerio de Salud detalla que se permitirá que las plataformas de recetas electrónicas puedan acceder a los repositorios abiertos y a sus respectivas interfaces de programación de aplicaciones para integrarse al ecosistema de salud digital y vincularse con las farmacias.
"Los repositorios de recetas electrónicas o digitales tendrán que permitir que todas las plataformas o sistemas de prescripción puedan almacenar las recetas que emitan dentro de su repositorio, sujeto a la cobertura del paciente", señala el texto oficial.
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El Ministerio de Salud señaló que esta medida es un paso fundamental para la implementación total de la Ley N° 27.553 de Recetas Electrónicas, que tiene el propósito de garantizar un funcionamiento seguro y eficiente del ecosistema de salud digital.
La Ley Nacional de Receta Electrónica busca garantizar una prescripción más segura y eficiente. Así también facilitar la trazabilidad del circuito de prescripción y dispensa
Por lo tanto, las plataformas de prescripción deberán cumplir con los protocolos de seguridad, como la integración mediante APIs certificadas, almacenamiento seguro de datos y sistemas de respaldo que protejan la información de los pacientes ante posibles fallas técnicas.
