Además de sus reservas de fosfato, Marruecos también cuenta con grandes recursos mineros, incluidos cobalto, cobre y pronto litio. Además, la estal Onhym ha firmado recientemente tres acuerdos de investigación. Las exploraciones deberían comenzar en 2025, indica el diario L'Economiste. Entre ellas, la anunciada por el canadiense Benoît Lassal, director general de Aya Gold and Silver.
Rabat tiene un plan ambicioso: duplicar los ingresos de la minería no fosfatada hasta más de 1.700 millones de dólares de aquí a 2030. Entre los proyectos: un centro mundial de producción y procesamiento de minerales para baterías, ya que los gigantes de la industria del sector han anunciado la creación de grandes empresas para fabricar vehículos eléctricos.
Marruecos es el noveno productor de cobalto del mundo, con 2.000 toneladas al año, y planea explotar sus reserva para alimentar la cadena de suministro de baterías recargables.
