SANTO DOMINGO (Licey.com).- El refuerzo de los Tigres del Licey Luis Campusano expresó su admiración por la intensidad y el ambiente que caracteriza al béisbol de la Liga Dominicana.
En su segunda experiencia en este escenario, el jugador de MLB subrayó las similitudes entre la atmósfera de los partidos locales y los playoffs en el béisbol de las Mayores.
“Me encanta. Es increíble. Personalmente creo que es como la atmósfera de playoffs, especialmente en las Grandes Ligas. Es muy similar en ese sentido”, aseguró Campusano.
El receptor de los Padres de San Diego destacó el alto nivel competitivo que encuentra en la LIDOM y como esa exigencia lo motiva a dar lo mejor de sí en el terreno de juego. “Es muy competitivo. Cuando juegas contra muchachos que les gusta competir, no se trata solo de talento, sino de salir y hacer tu trabajo, tratando de ayudar a tu equipo a ganar”, señaló.
El jugador de 26 años, quien previamente vistió el uniforme de las Estrellas Orientales, decidió regresar a la LIDOM para mejorar aspectos de su juego y, al mismo tiempo, aportar al éxito del Licey.
“Este es uno de los mejores niveles de juego en ligas invernales. La atmósfera, los fanáticos, especialmente la competencia, es realmente buena. Quería venir aquí para trabajar un poco y, al mismo tiempo, contribuir con los muchachos”, explicó.
Además de la atmósfera en el estadio, elogió la camaradería dentro del clubhouse de los Tigres: “La energía está por las nubes. Los muchachos se llevan bien y nos estamos divirtiendo. Es genial ver la interacción entre ellos y es muy especial ser parte de eso”.
Para Campusano, jugar en la República Dominicana tiene un significado especial, ya que su familia es oriunda de Santo Domingo.
“Es especial estar aquí y que puedan verme jugar porque no tienen muchas oportunidades de verme en los Estados Unidos. Agradezco el cariño y el apoyo de los fanáticos y estoy listo para ganar con ustedes”, afirmó.
Los Tigres del Licey, con Campusano en sus filas, buscan conquistar otro campeonato en una liga que, según el receptor, no tiene nada que envidiarle a la intensidad de los playoffs de las Grandes Ligas.