A menudo la soberbia es percibida como un sentimiento de superioridad, lo que desencadena en un mal hecho, pues los demás pueden considerarlo un ejercicio de narcicismo. Por su parte, el Diccionario de la Real Academia de la Lengua define soberbia como "altivez y apetito desordenado de ser preferido a otros" y, en su segunda acepción como " satisfacción y envanecimiento por la contemplación de las propias prendas con menosprecio de los demás".
En nuestra sociedad las personas soberbias abundan por todas partes, pero lo realmente importante es cómo influyen en las relaciones sociales. Este tipo de personas tienen una visión distorsionada de sí mismos y de los demás, logrando hacer sentir mal a los demás, incluso a sus propios seres queridos. En el ámbito laboral tiene gran repercusión pues puede terminar afectando al desarrollo emocional y personal del individuo.
El reconocido psiquiatra Enrique Rojas habla sobre la soberbia, afirmando que consiste en una cierta ceguera psicológica. Lo explica mediante el ejemplo: "uno solo es capaz de ver lo bueno que tiene y que ha conseguido, pero incapaz de asumir o reconocer los defectos personales en su justa medida. Al mismo tiempo no dirige la mirada hacia los otros, ya que permanece encerrado en uno mismo". Rojas explica que "está conducta hace muy difícil mantener una relación, ya que una persona que es incapaz de verse desde fuera, se aleja cada vez más de otras personas".
Identificar estas señales pueden ayudarte a entender este tipo de conductas. La clave tras reconocer a las personas soberbias está en la forma de actuar, es decir, de reconocer y ofrecer herramientas para mejorar esta conducta y por ende las relaciones interpersonales. Rojas afirma que " aprender a lidiar con estas actitudes es esencial para mantener una vida social y emocional más equilibrada".
El centro Área Humana, dedicado a la investigación, innovación y experiencia en psicología también ha decidido abordar el tema de la soberbia, entendiendo por esta como "una característica personal o una actitud de la persona que cree tener una posición de superioridad o de privilegios frente a los demás. También podríamos definirlo como una persona arrogante, altiva, vanidosa o prepotente". Así pues, señala otras características muy similares a las de Rojas a la hora de exponer a las personas soberbias.
1. Necesidad de admiración o atención exclusiva por parte de los demás.
2. Baja empatía y escasa capacidad de escucha.
3. Actitud impositiva de los propios criterios e ideas. Agresividad en la comunicación.
4. Dificultad para reconocer los propios errores y encajar las críticas. Baja introspección.
5. Egocentrismo, hablar de uno mismo en exceso.
6. Comentarios despectivos o minusvaloración.
7. Actitud de superioridad.
8. Suelen contar buenas competencias o habilidades sociales.
9. Excesiva preocupación por los logros o éxitos. Competitividad "no sana".
En muchas ocasiones, las personas soberbias suelen ocasionar rechazo y distanciamiento social, lo que ocasiona que tengan relaciones interpersonales muy superficiales o poco profundas con los demás. Pueden sentirse aisladas o percibir falta de apoyo. Por otro lado, las personas con soberbia pueden interpretar ese rechazo como algo negativo o doloroso a nivel emocional, o incluso como consecuencia de su posición de superioridad. Esto puede hacer que se encuentren más solos o aislados socialmente. Por último, la soberbia puede desencadenar problemas de autoestima o autovalía, puesto que son conductas de defensa, no resolutivas.