Las amenazas de deportaciones masivas de migrantes de Estados Unidos hacia México del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, son “un aviso de tormenta” ante el cual Tamaulipas, frontera con EU, se está preparando, dijo el gobernador Américo Villarreal.
El viernes pasado, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cerró una semana de especulaciones sobre las amenazas arancelarias de Trump y se mostró muy confiada en que su Gobierno llegará a acuerdos en temas de migración y narcotráfico para evitar dichos impuestos.
“Tenemos una frontera muy tranquila, con orden en la migración después de los programas de CBP, tenemos siete albergues (...) nos estamos preparando, pero les digo: no sabemos ni siquiera qué es lo que va a pasar”, dijo Villarreal a medios previo a la toma de posesión de Rocío Nahle como gobernadora del estado mexicano de Veracruz.
“Les hago el símil, estamos en un aviso de tormenta, no sabemos, quizás conforme se vayan acercando los días o los términos vamos a saber si esto es huracán o no y de qué grado, pero estamos preparándonos para poder darle solución a estos problemas”, añadió.
El mandatario estatal dijo que por las ciudades fronterizas de Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo pasan diariamente unas 500 personas en promedio y “aproximadamente tenemos en nuestros albergues de 2 mil 500 a 3 mil personas que están en espera de su cita” y recordó que los migrantes llegan con cuatro o cinco días de anticipación para garantizar su cita.
Previamente dijo que la frontera de Tamaulipas “es una de las más dinámicas de México; es el primer lugar de intercambio comercial vía terrestre (tractocamión) y el primer lugar de comercio a través de ferrocarril”.
El viernes, Sheinbaum reiteró lo que había dicho el jueves, tras una charla telefónica con Trump y dijo estar “convencida” de que habrá un acuerdo.
Insistió en que, al igual que lo afirmó en una carta el martes, durante la charla que sostuvo el miércoles con Trump le explicó lo que México hace para atender el fenómeno migratorio y el combate al narcotráfico, particularmente en contra del fentanilo.
Tras la conversación, Trump aseguró en Truth Social que Sheinbaum “aceptó detener la migración a través de México y hacia Estados Unidos, efectivamente cerrando la frontera”, mientras que ella publicó en la red social X que “reiteró que la postura de México no es cerrar fronteras”.