El Bayern de Múnich conservó este sábado a base de sudor y garra su imbatibilidad en la Bundesliga, al empatar en Dortmund ante el Borussia (1-1) en el 'Klassiker' del fútbol alemán, pero perdió por lesión a su delantero Harry Kane.
Los muniqueses concedieron su tercer empate en el campeonato alemán tras los sellados ante Bayer Leverkusen (1-1) y Eintracht Fráncfort (3-3), pero se mantienen líderes tras esta duodécima fecha.
Con 30 puntos de 36 posibles, el gigante bávaro cuenta con siete más que el Leverkusen (23), que había ganado horas antes en Berlín al Unión (2-1), y que el Fráncfort (23), que visita el domingo al Heidenheim.
Penalizado por sus guarismos fuera de casa (cuatro derrotas y un empate), el Borussia Dortmund, que lo había ganado todo como local en liga hasta este sábado, queda a 10 puntos del 'Rekordmeister'.
Aún invictos en la Bundesliga, los hombres de Vincent Kompany se vieron por detrás en el marcador poco antes de la media hora de juego con un gol del extremo izquierdo Jamie Gittens (27) e igualaron gracias a Jamal Musiala, de nuevo goleador de cabeza (85).
El Bayern llegaba al Signal Iduna Park tras siete victorias consecutivas sin recibir un solo gol entre todas las competiciones. Fue Gittens el que rompió la muralla tras una rápida cabalgada pegado a la línea de cal antes de trazar la diagonal al área y batir con la zurda a Manuel Neuer.
La entrada de Kingsley Coman en el costado izquierdo dinamizó el juego ofensivo bávaro, aunque el gol del empate llegó desde la derecha, a centro de Michael Olise rematado con clase con Musiala (su cuarto gol de cabeza esta temporada).
La mala noticia para el Bayern llegó con la lesión de Kane en el minuto 33. El máximo goleador muniqués abandonó el terreno de juego doliéndose de la cara posterior del muslo derecho.
"Ha dicho que no es muy grave, esperemos...", señaló Kompany mientras que el director deportivo Max Eberl anunció que se someterá a exámenes el domingo o el lunes.
El próximo martes, el Bayern recibirá al Bayer Leverkusen en octavos de final de la Copa de Alemania en el Allianz Arena.
También este sábado, el RB Leipzig (4º) se sumió en una profunda crisis de consecuencias imprevisibles al perder 5-1 en casa ante el Wolfsburgo (7º) en un partido en el que perdía 3-0 en el primer cuarto de hora de juego.
A la altura del Bayern en lo más alto de la tabla al término de la 8ª fecha de la Bundesliga (20 puntos ambos de 24 posibles), el Leipzig sólo ha sumado un punto en las cuatro últimas fechas, superado en Dortmund (2-1), en Hoffenheim (4-3) y ante Wolfsburgo (5-1).
El club del este de Alemania se halla ahora a nueve puntos del líder.
Es el sexto partido seguido del Leipzig sin victoria, si se añaden los reveses en Glasgow contra el Celtic (3-1) y en Milán contra el Inter (1-0) en Liga de Campeones, donde el club del este de Alemania se halla casi sin opciones tras cinco derrotas en otros tantos partidos.
Su entrenador Marco Rose se halla cada vez más bajo presión. "Marco Rose es nuestro entrenador", respondió el director deportivo Marcel Schäfer para el micrófono de Sky al ser preguntado si el técnico alemán estará el miércoles en el banquillo del Leipzig en el partido de octavos de Copa ante el Eintracht de Fráncfort.
El Leipzig ve así alejarse en la tabla al Bayer Leverkusen, que se impuso este sábado en Berlín ante el Unión (2-1) gracias a un gol del delantero checo Patrik Schick a falta de 20 minutos para el final que deja a los hombres de Xabi Alonso en tercera posición con 23 puntos, los mismos que el Eintracht Fráncfort.
Con tres victorias consecutivas entre todas las competiciones, el Leverkusen llega embalado al duelo de octavos de Copa de Alemania el martes en Múnich ante el Bayern.
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