Santo Domingo.-La temporada ciclónica que concluye este sábado dejó un total de 18 ciclones y un potencial ciclón en el océano Atlántico, el golfo de México y el mar Caribe.
Afortunadamente, República Dominicana experimentó sólo un impacto indirecto y de menor magnitud, según informó el Instituto Dominicano de Meteorología (INDOMET).
El único evento que afectó al país fue el huracán Beryl, que pasó al sur de la isla el 2 de julio, provocando aguaceros, tormentas eléctricas y oleajes anormales.
Este período, caracterizado por la formación de tormentas tropicales y huracanes, representa uno de los mayores retos anuales para las naciones del Caribe, incluida la República Dominicana.
Durante estos meses la República Dominicana se mantiene en constante alerta debido a su ubicación geográfica en el Caribe, una región propensa a recibir los embates de ciclones que pueden causar inundaciones, deslizamiento de tierra y daños significativos en infraestructura y agricultura.
En este 2024 la temporada ciclónica demostró una vez más la importancia de la preparación, la coordinación entre autoridades y la educación comunitaria para mitigar los impactos de estos fenómenos naturales.
Este año el país fortaleció sus mecanismos de respuesta a desastres, liderados por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Se activaron sistemas de alerta temprana, se realizaron evacuaciones preventivas y se distribuyó ayuda humanitaria en zonas vulnerables.
Sin embargo, el desafío de garantizar la resiliencia ante los huracanes sigue siendo una prioridad.
Temporada activa
Durante la temporada se registraron 11 huracanes, de los cuales 5 alcanzaron la categoría de huracanes intensos (vientos superiores a 178 kilómetros por hora; siete tormentas tropicales con vientos entre 63 y 118 kilómetros por hora, un potencial ciclón tropical, que aunque llegó a alcanzar vientos de 75 km/h, no se clasificó como ciclón debido a la ausencia de una circulación cerrada, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
En junio se formaron tres ciclones: la tormenta tropical Alberto (17 de junio), Beryl, que se convirtió en huracán (28 de junio), y la tormenta tropical Chris el 30 de junio, mientras que en julio no hubo ningún fenómeno.
En agosto hubo dos huracanes, Debby, el día dos y Ernesto, el día 11.
Septiembre fue el mes más activo con siete ciclones, entre ellos Francine, el día 8; Helene, el 23; Isaac, el día 27, y Kirk, el 29.
También se formaron tormentas tropicales como Gordon, el 11 de septiembre y Joyce el día 27, además del potencial ciclón ocho, el 15 de septiembre.
Octubre y noviembre
— Formación
En octubre se formaron cuatro ciclones, incluidos los huracanes Leslie, el día 22, Milton el 5 y Oscar el día 19, junto con la tormenta tropical Nadine, el 18 de octubre, mientras que en noviembre se formaron tres fenómenos.
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