Cuando se produce una tragedia como la DANA de Valencia, los ayuntamientos son la primera administración local a la que los ciudadanos acuden. Y en el caso de los municipios turísticos no solo se atiende a la población real, sino a los miles de visitantes que pueden tener en un día. Sin embargo, la capacidad de tomar decisiones sobre aspectos clave como las infraestructuras quedan lejos de sus competencias, por lo que reclaman ser actor principal en esa planificación así como mayor financiación para llevar a cabo obras clave que permitan anticiparse o reducir los efectos de una catástrofe natural.