La Antártida, el continente más frío y aislado del planeta, mantiene temperaturas extremas que desafían las capacidades humanas de resistencia. En esta región helada, los termómetros suelen registrar los valores más bajos registrados en la Tierra, y para sobrevivir a tales condiciones, se requiere una ardua adaptación y tecnologías avanzadas. Sin embargo, el 24 de junio de 2024, una ciudad ubicada en Sudamérica experimentó una temperatura de 21,9 grados bajo cero, un registro que equipara con las condiciones frías que prevalecen en la Antártida durante su temporada de verano en lo que va 2024.
Este evento, que podría parecer aislado, refleja el impacto que los cambios en el clima global están teniendo en diversas partes del mundo y pone en jaque el equilibrio de ecosistemas que han permanecido inalterados durante siglos. ¿Cuál es esta ciudad de Sudamérica y por qué fue la más fría del mundo por un solo día?
El lunes 24 de junio de 2024, a las 06.38 horas, Balmaceda, en la región de Aysén, al sur de Chile, alcanzó una temperatura mínima histórica de 21,9 ºC bajo cero, por lo que se convirtió en el lugar más frío del planeta fuera del Ártico y de la Antártida en lo que va 2024. Este evento meteorológico, confirmado por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), desató alertas debido a su rareza.
No obstante, no es la temperatura más baja registrada en la localidad, debido a que en 1958 se alcanzó los 28,3 ºC bajo cero. El frío extremo que llegó en 2024 fue suficiente para colocar a Balmaceda en los titulares internacionales, dado que igualó las temperaturas que se experimentan en los polos durante su temporada de verano.
La causa de este descenso fue una alta presión de origen polar que se desplazó hacia el sur del país; en consecuencia, surgió un fenómeno conocido como vaguada en altura. ¿Cómo se desarrolló? La alta presión se forma a unos 5.500 metros sobre el nivel del mar; esto permite que el aire extremadamente frío se desplace hacia la superficie.
Dicho fenómeno, que ocurre normalmente en regiones polares, subraya la intensidad de los cambios climáticos que afectan a diversas zonas del planeta. El aire seco y la falta de humedad contribuyeron a que las temperaturas cayeran aún más; de esta forma, alcanzó un nivel inusual para la zona.
Aunque en esta ocasión no se superó el récord histórico de -28,3 ºC registrado en 1958, también en Balmaceda, la magnitud de este evento recalca las severas variaciones del clima que afectaron a Sudamérica en los últimos años. En este contexto, el frío extremo no es un evento aislado, sino un indicio de cómo las condiciones meteorológicas se están volviendo más extremas y erráticas cada día debido al cambio climático.
El impacto de esta temperatura también se extiende más allá de los aspectos meteorológicos: las bajas temperaturas causaron problemas en la infraestructura local, como el congelamiento de tuberías, lo que interrumpió el suministro de agua en diversas zonas de la región. Además, las condiciones climáticas obligaron a suspender clases en algunas áreas, lo cual puso en riesgo la seguridad de los estudiantes y generó preocupaciones en la comunidad de Balmaceda.
