En medio de toda la polémica ocasionada con la contienda entre la Justicia y la Zona de Bajas Emisiones, los gobiernos autonómicos siguen con su afán por reducir al máximo la contaminación. Por supuesto, privando a los coches que más emisiones emiten de circular por los núcleos de las localidades. Estas áreas no solos suponen un problema para aquellos que, con motivo de su bajo nivel adquisitivo, no puedan permitirse comprarse un coche con las características que demandan estas directrices sino para los vecinos que residen en dichas ubicaciones.
Cada vez existen más restricciones que complican el desarrollo de nuestra rutina. Si ya tenemos demasiados problemas en nuestro día a día, este tipo de gestos no hacen otra cosa que complicar y disuadir la opinión de la gente con respecto a este tema. Los vehículos al ser tan costosos no están al alcance de cualquier. En este sentido, si bien cuidar nuestro planeta es una constante de nuestros dirigentes, las formas y el fondo de la cuestión dejan más preguntas que respuestas.
La DGT fue la piedra angular de la implementación de las llamadas Zonas de Bajas Emisiones. Siguiendo con el plan que comenzaron hace años, los vehículos que sean calificados por la etiqueta B no podrán circular por estas ubicaciones. Además, los automóviles que no obedezcan esta norma, y tengan esta distinción, serán sancionados gravemente. Sin embargo, al ser una medida que afecta a una masa social bastante grande su aprobación será de forma paulatina dividiéndose en tramos de dos años siguiendo un reglamento específico.
Ni Andalucía ni Madrid son las candidatas de encabezar esta lista aunque seguramente se unan en un futuro no muy lejano a ella. Se trata ni más ni menos que de Cataluña, esta comunidad será la pionera que precederá al resto de España en esta lucha por eliminar la polución de nuestras calles. En este sentido, la planificación de su aplicación ya se ha aprobado en la Generalitat con un calendario que indicará las fechas claves de este suceso. Esta restricción afectará a las 23 ciudades que superan los 50.000 habitantes de Comunidad Catalana entre las que se encuentran Barcelona, Tarragona o Girona, entre otras.
El 1 de enero de 2026 pasará a ser una realidad palpable aunque no de manera imperativa. Tal es el caso que en esta primera aproximación los vehículos designados tendrán terminantemente prohibido el paso en los días que se aplique el protocolo de no contaminación, por lo que dependerá del día y de los niveles de contaminación. no será hasta el 3 de enero de 2028 donde la restricción será total, sin excepciones.
Actualmente estos coches si que pueden circular por las ZBE a no ser que sean de protección especial. Lo único es que esta clase de automóviles no pueden aparcar en Zonas del Servicio de Estacionamiento Regulado. Por tanto, solo queda esperar para ver cuál es el resultado y las consecuencias de este suceso y si el resto de comunidades siguen sus pasos.