La magistrada presidenta, Mónica Soto, improvisó su informe anual de actividades en el encuentro anual de magistraturas electorales, en donde sostuvo que el Tribunal Electoral ha cumplido con sus funciones y lamentó que hayan sido “juzgados y atacados” por aplicar textualmente la Constitución, lo que dijo, “es un orgullo” para una institución que imparte justicia.Aunque legalmente la presidencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación está obligada a rendir su informe de manera presencial en una sesión especial ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación y con el pleno de la Sala Superior, por primera vez en 30 años del sistema electoral no fue así.La magistrada presidenta, Mónica Soto, informó este lunes en el encuentro nacional de magistraturas electorales que decidió enviarlo por escrito y pidió “que me den la oportunidad de rendirles cuentas a ustedes, no de manera extensa, no se preocupen”.En su mensaje, Soto Fregoso destacó que este año que estuvo al frente del Tribunal Electoral, en medio “de la turbulencia” que enfrenta el país, las magistraturas electorales sufrieron ataques que calificó como un orgullo, pues dijo, son consecuencia de respetar las leyes y la Constitución tal como es su deber hacerlo.“En medio de la turbulencia de estos tiempos, el Tribunal Electoral ha sido eficaz en la defensa de su competencia, respondiendo con institucionalidad y entereza. Nuestros fallos, muchos de ellos o algunos, han sido objeto de crítica, ataques, entre otros calificativos. Nuestra respuesta ha sido la Constitución, la prudencia y la serenidad, sabedores de que el apego a la Carta Magna legitima el actuar de esta institución y sus servidoras y servidores públicos. “Nadie puede reprocharnos que nos hemos alejado de la Constitución. Y ante esta turbulencia hemos sido juzgados y atacados por aplicar textualmente la Carta Magna, eso para una institución impartidora de justicia es realmente un orgullo”.Señaló que ante la reforma judicial en marcha, las magistraturas electorales en funciones “somos la última generación institucional que le dio identidad al sistema jurídico electoral mexicano durante 30 años” y que ahora, verá una transición a un modelo diferente en el que serán elegidos desde las urnas.“Nuestra función construyó, reforzó y dio vigencia y actualización al modelo democrático nacional que hoy vivimos, de lo cual no tengan duda podemos, ustedes y nosotros, dar una respuesta contundente a nuestro país. Ahora nos toca también participar en una transición en las reglas del juego, esas no las pusimos nosotros.“Los proyectos políticos, los programas de acción no corresponden a este ni a ningún Tribunal del país, son otros poderes los que les corresponden estos cambios. Estamos siendo testigos del cierre de un ciclo y dando vida a uno nuevo. Esto, sin duda alguna, representa cierto grado de incertidumbre, pero también de oportunidades. Y estos tiempos de cambio demandan de la Judicatura Electoral unidad, cohesión y refrendar nuestro compromiso con los principios rectores de nuestra profesión”.Deseó éxito a quienes se inscribieron en este proceso de renovación del Poder Judicial por la vía democrática, y dejó claro que en el caso de la Sala Superior del Tribunal Electoral “ningún integrante hemos ido a inscribirnos. Así que estemos en paz y tranquilos que seguimos cumpliendo con nuestras responsabilidades desde esta instancia”.La magistrada presidenta destacó los retos que implicaron la elección presidencial que ella condujo desde el Tribunal Electoral y que consideró, será recordado como “el año en que la madurez del pueblo de México, la fortaleza de su democracia y la decisión tomada por una mayoría ciudadana concedió el poder público a una mujer, y no es cosa menor hablando siempre de nuestras luchas”.Y externó su compromiso en mantener la independencia, autonomía e imparcialidad en los procesos venideros, principalmente en el más reciente sobre la reforma judicial.Aquí puedes ver el mensaje:IOGE
