El informe de la Unidad Central Operativa sobre las comunicaciones intervenidas a la fiscal provincial de Madrid afirma que "la filtración debe iniciarse" en el Ministerio Público y revela las luchas internas en la Fiscalía por el caso
El juez del Supremo avala la intervención del teléfono del fiscal general y niega que esa información vaya a filtrarse
El primer informe que la Guardia Civil ha remitido al Tribunal Supremo apunta directamente a la Fiscalía como origen de la filtración de los emails de Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso. El documento, que ha podido examinar elDiario.es, no recoge pruebas concretas que demuestren de dónde salió la información pero afirma que “la filtración debe iniciarse” en el Ministerio Público, detalla las conversaciones que la fiscal provincial de Madrid Pilar Rodríguez mantuvo con el propio fiscal general en esos días de marzo y pide al juez Ángel Hurtado que analice en profundidad los correos y mensajes de Álvaro García Ortiz al entender que tuvo una “participación preeminente” en el proceso que derivó en la filtración.
Los agentes de la UCO han remitido ya el primer informe que encargó el juez Hurtado después de los registros de finales de octubre: un análisis de 57 páginas de todos los mensajes e mails intervenidos a Pilar Rodríguez. Mensajes que arrancan en la primera semana de marzo de este año, antes de que elDiario.es publicara en exclusiva que la Fiscalía había denunciado a Alberto González Amador por un doble fraude fiscal de más de 350.000 euros.
El grueso del informe se centra en los días 13 y 14 de marzo, cuando el diario El Mundo publicó una información en la que afirmaba que la Fiscalía había ofrecido un pacto al abogado de González Amador. En ese momento la Fiscalía General contacta con Rodríguez y empiezan a requerir esos emails al fiscal Julián Salto, el que investigó y denunció al empresario, para emitir una nota de prensa que desmintiera esa información: fue el abogado, y no la Fiscalía, el que puso el pacto encima de la mesa.
Los correos y mensajes intervenidos no reflejan si la Fiscalía filtró o dio orden de filtrar esa información a la prensa, siendo la Cadena SER la primera en hacerse eco del contenido concreto de los emails de Alberto González a las 23:51 de esa misma noche. Pero entre sus conclusiones sí da por hecho que la filtración arrancó en el Ministerio Público, con el papel “preeminente” que el propio fiscal general ha reconocido a la hora de elaborar el comunicado que emitió la Fiscalía de Madrid a la mañana siguiente.
El juez Hurtado ya tiene este informe encima de la mesa y ha levantado el secreto de sumario que pesaba sobre él, aunque ha especificado en una de sus resoluciones que “está prohibida su difusión a terceros”. Todavía está a la espera de que la misma unidad de policía judicial analice los correos y mensajes intervenidos al fiscal general el pasado 30 de octubre, encargo que ha reforzado este lunes al pedir que hagan una copia del material incautado y analicen las comunicaciones fechadas entre el 8 y el 14 de marzo de este año.