En 2022, Chile registró un crecimiento histórico en las exportaciones de litio, alcanzando un valor de US$3.648 millones. Este aumento del 581% interanual posicionó al país como un proveedor clave en el mercado mundial del litio, con China absorbiendo el 72% de las exportaciones totales. El carbonato de litio, con una pureza del 99,2%, lideró los envíos, mientras que el hidróxido de litio, con un valor agregado superior, representó un 7,5% de las ventas totales.
El auge del litio refleja su creciente importancia en sectores estratégicos como la electromovilidad y el almacenamiento de energías renovables, factores centrales en la transición energética global. Según Claudia Sanhueza, subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, "Chile está en una posición de privilegio al contar con importantes reservas de litio, fundamentales para enfrentar los desafíos de la descarbonización".
El mercado chino se consolidó como el destino más significativo para el litio chileno, el cual representa más de dos tercios de las exportaciones. Este material es esencial para la fabricación de baterías de iones de litio, que alimentan vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento energético.
Otros destinos destacados fueron Corea del Sur, con un 15% de las exportaciones, y Japón, con un 7%. Sin embargo, el protagonismo de China radica en su demanda constante y su rol como líder en la adopción de tecnologías limpias.
En el primer bimestre de 2024, las exportaciones de litio a China crecieron un 38%, alcanzando 25.878 toneladas. Esto demuestra cómo el país asiático sigue impulsando la industria chilena y el mercado mundial del litio.
El litio se ha convertido en un pilar para la economía chilena, el cual representó el 8,2% de las exportaciones totales en 2022. Según datos del Banco Central, la extracción de este mineral contribuyó con un crecimiento del 10,4% en el PIB minero.
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El Salar de Atacama, explotado por las empresas SQM y Albemarle, concentra el 90% de las reservas nacionales de litio, consolidando a Chile como el segundo mayor productor mundial, después de Australia. A pesar de la volatilidad en los precios, las proyecciones indican que la demanda global de litio continuará creciendo debido a su papel en la industria automotriz eléctrica y la transición energética.
