Realidad virtual, tecnologías inmersivas y nueva museografía permiten vivir y sentir el ambiente de la cartuja de Escaladei, la primera que se erigió en el siglo XII en la Península Ibérica, en el marco del proyecto 'Els ulls de la història', que impulsa el Departamento de Cultura de la Generalitat. La iniciativa, presentada este viernes en el monumento por la consellera de Cultura, Sònia Hernández, supone "una puesta al día del conjunto después de su restauración y de las intervenciones arqueológicas". Se han renovado los relatos en torno al antiguo monasterio cartujo, ha señalado la consellera, y "a partir de historias cotidianas que pueden resultar anecdóticas, se puede transitar de lo particular a lo general".
Para Hernández, esta experiencia supone para el visitante "un viaje en el tiempo y conectar con la vida como fue hace siglos en esta cartuja" y ha añadido que "socializar el patrimonio es clave para divulgar la cultura". Las actuaciones realizadas en el monumento combinan recursos analógicos, como la actualización de la señalización, con el uso de nuevas tecnologías, como la realidad virtual y otras experiencias inmersivas.
Esta iniciativa, que ya se implementó en el yacimiento rupestre de El Cogul (Lleida), potencia las historias de las personas que habitaron estos muros y muestran cómo eran los espacios que han sufrido alteraciones a lo largo de los años, especialmente desde el abandono de la cartuja en el siglo XIX.
Uno de los nuevos recursos en la visita es una guía multimedia multilingüe que acompaña al público desde su propio teléfono móvil durante todo el recorrido, identificando y contextualizando cada espacio, un recurso que combina contenidos explicativos, recreaciones en 3D y también integra voces de los diferentes personajes que habitaron la cartuja. Estos diálogos ficticios conectan la realidad del visitante con la vida cotidiana de los monjes cartujos y evocan las emociones que producían los conflictos de aquella época.
Junto a la majestuosa iglesia, en lo que fue la sala capitular de los padres cartujos, donde habría estado el altar, se puede ver la instalación audiovisual 'El silencio eterno', un tríptico inmersivo inspirado en el formato del retablo, que evoca la cotidianeidad de los monjes, en la que el silencio y los sonidos de la naturaleza eran protagonistas de la vida espiritual, curiosamente en un espacio en el que los monjes se reunían para deliberar sobre los hechos de la comunidad. El itinerario expositivo concluye con una experiencia inmersiva de realidad virtual que transporta al visitante, enfundado en unas gafas, a la cartuja del siglo XVII a través de la voz y la experiencia del artífice de la decoración de la iglesia, el pintor Joaquim Juncosa, que era uno de los hermanos legos.
La consellera ha comentado que "la elección del personaje no ha sido arbitraria, sino que enlaza con la voluntad de rescatar historias cotidianas que ayudan al público a conectar con el pasado", en este caso con la de Juncosa, que fue expulsado de la cartuja y se trasladó a Roma, donde murió en 1708.
Joya del renacimiento catalán y puerta de entrada a la comarca del Priorat con la sierra del Montsant como telón de fondo, Escaladei es el único monasterio cartujano accesible al público en Cataluña y este año celebra el 830 aniversario desde su fundación, que tuvo lugar en 1194 gracias a una concesión del rey Alfonso el Casto.
En 2007, la Generalitat desplegó un plan integral de recuperación del monumento, que ha incluido las restauración de la zona cenobítica con la reconstrucción del claustro menor, la restauración el capítulo de los legos, la sala capitular y el refectorio, la adecuación y enjardinado de los accesos, la restauración del huerto y el mirador de la celda C y la restauración y musealización del claustro mayor y de la iglesia.
Tras esta implantación, el programa 'Els ulls de la història' permitirá a lo largo de 2025 la museografía del centro románico del Vall de Boí, el Monasterio de Sant Pere de Rodes y el Castillo de Miravet, ha anunciado Hernández.