Koldo García Izaguirre, quien fue asesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos, fue arrestado el martes 20 de febrero por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en Alicante. Sin embargo, quedó en libertad el 22 de febrero. Se le atribuye un presunto delito de corrupción vinculado al cobro irregular de comisiones en la adjudicación de contratos relacionados con la adquisición de mascarillas durante la pandemia de COVID-19.
Estos supuestos sobornos estarían vinculados con contratos de suministros sanitarios dirigidos a los ministerios de Interior y Transportes, además de a varias comunidades autónomas, entre ellas Baleares y Canarias.
En el operativo también fueron detenidas otras 19 personas, entre ellas Víctor de Aldama, que compareció ayer ante la Audiencia Nacional y reconoció su implicación en el reparto de sobres con miles de euros, que supuestamente recibieron personalidades como José Luis Ábalos, Santos Cerdán o Koldo García, entre otros
Originario de Baracaldo y con 54 años de edad, Koldo García Izaguirre trabajó como vigilante de seguridad, desempeñándose también como escolta en ciertas ocasiones. Militante del PSOE, miembro de UGT y de la plataforma Stop Desahucios, ocupó el cargo de concejal por el Partido Socialista de Navarra (PSN) en el municipio de Huarte entre 2011 y 2015.
En junio de 2011, la Audiencia Provincial de Navarra le impuso una multa de 900 euros tras ser declarado culpable de agredir a un menor de 16 años durante la celebración de la final del Mundial de Sudáfrica, en la que España se coronó campeona.
El llamado caso Koldo, que ha generado un intenso debate político en España, también es conocido como la operación Delorme, nombre que hace referencia al papel central de este individuo en las investigaciones judiciales.
El escándalo en torno a esta presunta red de corrupción se debe, en gran parte, a los puestos que García Izaguirre ha ocupado en los últimos años. Se le imputa un supuesto delito de corrupción relacionado con el cobro indebido de comisiones en la asignación de contratos para la compra de mascarillas durante la crisis sanitaria provocada por la COVID-19.
Ahora, Víctor de Aldama, tras declarar en el día de ayer en la Audiencia Nacional, lo vuelve a poner en el punto de mira. El empresario, abogado y asesor político reconoció que entregó a Koldo sobres con miles de euros y que también habría creado, presuntamente, siete sociedades en Portugal para intentar sacar de España los beneficios que habría obtenido en relación a estos contratos vinculados al caso Koldo.
