Las tensiones entre Perú y Chile han persistido a lo largo del tiempo, motivadas por disputas territoriales y rivalidades culturales, como el derecho sobre el pisco. Las controversias no solo involucraron a la población, sino que también alcanzaron escenarios judiciales. La papa, reconocida como símbolo de identidad peruana, también fue centro de una polémica cuando Chile intentó registrarla como parte de su patrimonio.
El origen de esta controversia surgió cuando un investigador chileno anunció su intención de inscribir como patrimonio nacional cerca de 280 variedades de papa descubiertas en la isla de Chiloé. Además, afirmó que existen registros que indican que en Chile se consumía papa hace 13.000 años, mientras que en Perú los cultivos datan de aproximadamente 8.000 años. Estas declaraciones no pasaron desapercibidas y generaron una rápida reacción de los peruanos, quienes rechazaron tajantemente cualquier idea que cuestionara a Perú como la cuna de este tubérculo.
Frente a la avalancha de críticas y dudas, Andrés Contreras, docente de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Austral de Chile y líder de la investigación, aclaró su postura. Subrayó que su objetivo era únicamente registrar las variedades de papa propias del territorio chileno en el Registro de Variedades del Servicio Agrícola y Ganadero.
"Son variedades que han crecido y se han desarrollado, han evolucionado en el nivel nacional, y queremos protegerlas", expresó.
Además, añadió que la finalidad es "evitar que cualquier persona inescrupulosa lo inscriba a su nombre y diga que ese material le pertenece y quiera exigir pago por ello".
Al respecto el profesor, recalcó que el proyecto no busca afirmar que el tubérculo sea de origen exclusivamente chileno, sino que el fin sería salvaguardar las variedades domesticadas del sur de Chile.
"No decimos que la papa es de Chile. Sólo estamos tratando de proteger las variedades locales", sumó Contreras.
"Hay un centro principal de domesticación de la papa que es en la meseta peruano-chileno-boliviana-argentina, donde los pueblos aymaras y quechuas que en aquellos tiempos no tenían los límites que hoy día tienen estos países, domesticaron la papa y la hicieron para el consumo", manifestó el académico en una emisora chilena.
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En ese contexto, el exministro de Relaciones Exteriores del Perú, Óscar Maúrtua, reafirmó categóricamente que la papa es, sin lugar a dudas, originaria del territorio peruano. Además, calificó como improcedente e inapropiada la intención chilena de declarar este tubérculo como parte de su patrimonio nacional. Ante esta controversia, el Congreso de Perú respondió aprobando una ley destinada a proteger la identidad de la papa. Paralelamente, el país tomó la decisión de iniciar el proceso de patentarla internacionalmente como un producto representativo de su legado cultural y agrícola.
En una rueda de prensa, Maúrtua enfatizó que la papa "es la esencia de la peruanidad (…), no tenemos nada que dudar sobre la autenticidad de lo que es nuestro patrimonio".
"No cabe duda que en el imaginario nacional latinoamericano no haya otro lugar de origen de la papa que el Perú", enfatizó.
Asimismo, Maúrtua aseguró que planificarían conversaciones con el Gobierno chileno para abordar el tema de la papa y exponer el origen de la papa con argumentos científicos.
