El 2 de julio de 2023, y desde Guanabo, en La Habana, Evelio León Díaz alertó aquí que ese balneario perdía metros de arena por la erosión. Y urgía fomentar más pasarelas de acceso a la playa, para la protección de las dunas. Añadía que para preservar las playas del Este, se debe propiciar que las dunas se levanten y se protejan con las pasarelas de acceso. Y que a estas últimas se les brinde el mantenimiento que requieren.
Hace años, decía, se trabajó muy bien en parte de Boca Ciega, donde hay dunas naturales, protegidas en parte por pasarelas. Pero todo parecía terminar ahí. No se siguió estimulando el desarrollo de dunas, y no se construyeron más pasarelas. Además de las ya creadas, la mayoría fue dejando de ser útil.
Evelio contaba que preguntó en el consejo popular por qué no se seguían construyendo pasarelas y no se les daba mantenimiento a las existentes. La respuesta fue que no estaban tales gastos en el plan del municipio. Él dudaba de si esas inversiones podían competir con las grandes necesidades que tiene un municipio. Lo veía muy difícil, ante tantas casas para albergados, reparación de escuelas, círculos infantiles o policlínicos… Sostenía que la protección de la costa, incluida en la Tarea Vida, no es solo de interés local, municipal o provincial. Es de interés nacional, por tanto debían esas inversiones decidirse en un presupuesto nacional del Citma.
«Debemos obrar con celeridad. La naturaleza no da muchas treguas, y tal vez nos demos cuenta demasiado tarde. El crecimiento del nivel del mar no podrá detenerse, pero todo lo que hagamos por proteger nuestras costas mitigará los efectos adversos o al menos demorarán más en producirse», concluía.
El pasado 15 de octubre, Evelio enfatizaba aquí que, al parecer, no ha habido mucha preocupación, pues ya las pasarelas que requerían mantenimiento casi no existen.
Responde Osleidys Torres Valdespino, delegada territorial del Citma en La Habana, que esa entidad, junto a centros de investigación, realiza desde 2011 estudios de playas pertenecientes a la Ensenada de Sibarimar, como parte del proyecto Rehabilitación funcional de dunas de playas del Este. Y hasta hoy se han estudiado 7 901 metros, el 75 por ciento de playas de dicha ensenada. Quedan pendientes los tramos desde las canchas de Boca Ciega hasta Rotonda de Guanabo, Brisas del Mar y Rincón de Guanabo, para el mediano plazo.
El macroproyecto Escenarios sobre Peligros y Vulnerabilidad Costera para los años 2050-2100, añade, arroja que el sector de Guanabo está identificado como una playa de erosión interna, por lo que se incluye entre las zonas priorizadas del Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida).
Y con la afectación del huracán Irma allí en 2017, se decidió adelantar los estudios para su rehabilitación, desde 2018 hasta 2023. Incluyó levantamiento topográfico detallado del área de playa a rehabilitar y acciones para restablecer la vegetación costera en pos de la estabilización de la duna. Y la creación de pasarelas o accesos públicos hacia la playa.
Mas, para acciones de rehabilitación, primero deben solucionarse los problemas allí con la red de alcantarillado, el tratamiento de los residuales líquidos y la eliminación de construcciones en áreas donde debe conformarse la duna.
Sobre los accesos o pasarelas, indica que desde 2013 comenzaron a realizarse para permitir el acceso a la playa sin afectar la duna. Las primeras tres se ubicaron en el sector de Tropicoco, y se incrementaron a ocho en 2014, con la rehabilitación de un tramo de Boca Ciega, mediante presupuesto anual del Citma.
Con la pandemia de la COVID-19, no se ejecutaron acciones de mantenimiento ni reparación de las pasarelas, por lo que estaban muy deterioradas. A ello, se suma el incremento de los precios de esas obras. En 2024, por medio del Fondo Nacional de Medio Ambiente se pudo financiar la sustitución de los accesos en el tramo de Tropicoco, inversión que se afectó con el paso del huracán Milton.
A ello, agrega, se suma la indisciplina social, un gran problema todos estos años para el mantenimiento y conservación de las obras ejecutadas. No obstante, se continúan realizando estudios, con el objetivo de lograr la rehabilitación integral de ese sector, así como la protección y conservación de sus recursos naturales.