Después de más de un año en vigencia sobre las importaciones, el impuesto PAIS llegará a su fin el próximo 24 de diciembre y el impacto económico de su eliminación alza las expectativas, sobre todo en relación a la inflación en un escenario de mayor competencia de productos del exterior.
Aunque el gobierno asegura que la baja del impuesto PAIS al 7,5% para el pago de importaciones de bienes y fletes ya se hace sentir en el precios de bebidas y alimentos, en una franja que va del 1,5% al 10%, y con una media de 2,4%, analistas precisan que en el nivel general el efecto fue "acotado" pero sirvió para recomponer márgenes de ganancia.
"El impacto de estas medidas no es directo ni lineal, dado que el resultado dependerá de las distintas estructuras productivas y la participación de materias primas e insumos importados en la elaboración de cada uno de los bienes", analizaron desde la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios y Bebidas (COPAL) y destacaron que la consolidación del sendero de baja de la inflación en general, "impacta a todas las cadenas de valor".
Tanto el alivio tributario como las medidas de desregulación que anunció esta semana el Gobierno a través de los decretos 1212/2024, 433/2024, y 434/2024 que derogaron una serie de normas que alcanza la agenda de comercio y producción de bienes y servicios es "clave" para el crecimiento de la economía del país.
"Estas propuestas buscan reducir las cargas administrativas, agilizar los procesos de habilitación y certificación, y fomentar un entorno que promueva la innovación y el crecimiento del entramado productivo", expresaron desde COPAL pero no precisaron resultados en números sobre el efecto de la reducción del impuesto PAIS en costos y su traslado a precios minoristas.
Del otro lado del mostrador, tanto los supermercadistas nucleados en ASU como quienes representan el consumo mayorista (CADAM), no poseen indicadores sobre el efecto sobre los productos que comercializan.
Por su parte el equipo económico que lidera Luis Caputo tomó como reflejo positivo del incremento de importados, los resultados del índice de la construcción del INDEC que sólo subió 1% en octubre. Se trata de la cifra más acotada desde los primeros meses de la pandemia de COVID-19, cuando los precios respondieron al derrumbe en la demanda.
"La reducción del impuesto País se ha manifestado en la mayoría de los productos importados. Se nota una mayor oferta de estos por la disminución del impuesto y por la eliminación de varios impedimentos para importar", analizó Pedro Brandi presidente del Grupo Construya y aseguró que estos fenómenos se acentuarán con la eliminación definitiva en diciembre ya que "ciertas compras de insumos y equipos se ha diferido".
En tanto, en el nivel general, hasta ahora, el efecto de la baja de 10 puntos fue "relativamente acotado" ya que, según Equilibra, representó una reducción en torno a 0,2 puntos en la inflación de septiembre que en lugar de 3,5% hubiese anotado 3,7%, pero en los meses siguientes el impacto ya se consumió. En tanto, distintos sectores productivos reconocen que tanto esta decisión oficial como la quita de aranceles a insumos y materiales junto a la desregulación del comercio "ayudó a ordenar" el mercado y los márgenes de ganancia.
"En algunos precios como vehículos, electrodomésticos, bajaron la primer semana tras la reducción pero a lo largo de septiembre terminaron empatados", explicó Lorenzo Sigaut Gravina, director de Análisis Macroeconómico de la consultora y aclaró que el efecto es acotado porque se trata del 5% en la ponderación de Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC.
Respecto a octubre la contribución radicó en mantener cierta estabilidad de precios que aporta a la reducción de la inflación y, de cara a la eliminación del impuesto, las consecuencias recién llegarán en enero. "A la larga o la corta las importaciones van a reaccionar a este escenario porque lentamente se están recuperando los ingresos y el empleo dejó de caer", planteó el economista.
Frente al 2025 proyectó que "la salida del impuesto PAIS, con un tipo de cambio real que se sigue apreciando y un gobierno que flexibiliza y facilita a partir de baja aranceles, aumento del límite para compras vía courier incrementará la demanda de bienes del exterior".
Como en los 90´, la contracara del modelo económico liberal que prioriza la estabilidad de precios, según Sigaut Gravina, se encuentra en sectores sensible al ingreso de productos del exterior con imposibilidad para competir como las pymes industriales que "deberán revender o producir una parte pequeña".
Aunque la baja de precios no fue significativa lo que se verificó con la modificación al impuesto PAIS, es que dentro de los componentes de productos terminados se redujeron algunos puntos del costo, indicó la tributarista Elisabet Piacentini, aun así, aclaró que las fábricas todavía están trabajando con mucha materia prima que en su momento pagó el impuesto.
Sobre el fin del tributo, la especialista dio una doble lectura. "Por un lado, genera alivio en las empresas que importan componentes, incluso las que exportan y podrán ser más competitivas pero, en paralelo, la industria nacional teme por el efecto dumping que puede destruir sectores, si los productos ingresan a precios más bajos de lo que cuesta fabricarlos en el país.
Un caso típico es el de los neumáticos que se consiguen por valores muy inferiores en países limítrofes. Este mercado se desreguló mediante reducción de aranceles y la flexibilización que dispuso la Resolución Nº4 34 que publicó este martes en el Boletín Oficial, la Secretaría de Industria y Comercio.
La norma que facilita la solicitud de Certificado de Homologación de Autopartes y/o Elementos de Seguridad (C.H.A.S.) afecta los neumáticos utilizados en automóviles de turismo lo que incluye los del tipo familiar ("break" o "station wagon"), los de carreras y los utilizados en autobuses o camiones (medida 11,00-24).
"Al eliminar trámites previos se simplifican los procesos, se reducen tiempos y por consecuencia, costos. Esto es clave en el proceso de mejorar la logística interna que conecta el país así como también facilitar el proceso de renovación", planteó la consultora Yanina Lojo.
Desde el mercado, Hugo Ruffa, gerente Comercial de Neumen Performance Center, dijo que "lo único que va a hacer es acomodar la rentabilidad de los que están importando porque la baja de precios ya se dio durante todo el año". Como uno de los principales distribuidores de Pirelli en Argentina aclaró que mientras la inflación supera el 100% en lo que va el año "el neumático no sólo no aumentó sino que bajó sus precios en torno al 50%, por la baja en el consumo".
Como ejemplo, mencionó que la Medida 175/65 14 fórmula Pirelli 12 se comercializó a $85.600 en diciembre de 2023 y ahora cuesta $84.200. "Se ha logrado la baja por la situación de la economía, pero no por importación" dijo y definió que los cambios "no moverán nada" porque el mercado ya redujo los precios a costa de una mínima rentabilidad.
Según proyectó el analista fiscal Nadin Argañaraz, sobre el resultado de la decisión oficial de retrotraer a 7,5% el impuesto PASI para finalmente no prorrogarlo en diciembre, se confirma una "puja" de las empresas que buscan capturar la nueva brecha para incrementar sus márgenes o realizar un traslado parcial o total de la rebaja.
El especialista tributario había analizado tres escenarios según la carga tributaria del impuesto PAIS en el precio de venta final neto de IVA de 2%, 4% y 6% para ciertos bienes nacionales que utilizan insumos importados y estimó que el impacto oscilaría entre 1,14 y 3,43% con la reducción y entre 2 y 6% si se elimina, según la dependencia de insumos del exterior.