Los bomberos luchan contra un incendio forestal que avanza rápidamente en un vecindario al noroeste de Los Ángeles, mientras más de 14.000 personas son evacuadas en California, Estados Unidos. Las condiciones climáticas extremas complican la situación e indican una clara de situación de riesgo para los habitantes.
Los equipos de bomberos están realizando rescates en medio de un denso humo y llamas. En el condado de Ventura, el incendio Mountain ha causado daños significativos, mientras que otro incendio en Malibu ha quemado 20 hectáreas. Las autoridades de Estados Unidos informan que al menos dos personas han resultado heridas y varias estructuras han sido destruidas.
Los vientos de Santa Ana, junto con la sequedad del aire, han permitido que las brasas del fuego se desplacen hasta 4 km. El Centro de Predicción de Tormentas ha emitido un nivel de riesgo “extremadamente crítico” para las condiciones de incendio en el sur de California. Esta situación ha llevado a cortes de energía en varias áreas para prevenir más incendios.
Los bomberos han llevado a cabo rescates intensivos, sacando a personas de sus hogares y recuperando a otros de calles en llamas. El Capitán de Bomberos de Ventura, Trevor Johnson, destacó la valentía de los equipos en este día crítico, donde el riesgo es alto y las condiciones son peligrosas.
Para mitigar el riesgo de incendios, proveedores de energía como Southern California Edison y PG&E han cortado el suministro eléctrico a miles de clientes. Se estima que hasta 250.000 clientes podrían verse afectados por estos cortes, que continuarán hasta que las condiciones mejoren.
A pesar de que se espera una disminución en los vientos, las condiciones secas y la abundancia de combustible seco seguirán siendo una preocupación significativa para el estado. Los incendios forestales continuarán siendo una amenaza hasta que llegue la temporada de lluvias.
