El icónico bar Licorería Limantour se transforma en un espacio donde el arte y la vida se celebran de una forma única y cautivadora.
Del 29 de octubre hasta el 3 de noviembre, la obra de la artista oaxaqueña Isabel Sánchez llenará el lugar con su exposición “La Muerte Chiquita”, un homenaje a las tradiciones y mitos de México en colaboración con el tequila Don Julio 1942.
En estos días los asistentes podrán disfrutar de un menú diseñado especialmente para la ocasión, junto con la impecable mezcla de sabores de Don Julio 1942.
Además, la fachada del bar estará adornada con flores de cempasúchil doradas, creando un altar contemporáneo que evoca un puente entre el mundo de los vivos y el más allá, y que, como en un ritual, invitará a los visitantes a rendir tributo a la vida en cada brindis y en cada sorbo.
La exposición “La Muerte Chiquita” revela la maestría de Isabel Sánchez, quien con su particular estilo y técnicas ancestrales imprime en sus piezas una conexión profunda con la tierra.
Isabel utiliza tierras recolectadas en diversas regiones de Oaxaca y las mezcla con pulque en un proceso de fermentación que da un carácter único a su obra. Su enfoque artesanal le permite capturar el ritmo de su corazón en cada pieza de cerámica, transmitiendo un simbolismo que honra a la naturaleza y al espíritu de las leyendas mexicanas.
Una de las partes más destacadas de la exposición es “Brebaje y Placer”, una serie de vasos en forma de calaveras y diablos, que, más que simples recipientes, son manifestaciones visuales de los mitos y rituales en torno a la vida y la muerte.
Estos vasos tequileros, creados en colaboración con Don Julio 1942, invitan a los asistentes a disfrutar de una experiencia sensorial en la que el tequila y el arte se entrelazan en un acto de celebración.
Con figuras que evocan la magia, los placeres ocultos, la figura del diablo y la misma muerte, estos vasos recuerdan a los antiguos menjurjes y tradiciones que rinden tributo al disfrute de la vida.
Isabel Sánchez, con una trayectoria de más de 20 años y habiendo colaborado con el célebre Francisco Toledo, trae a Licorería Limantour una propuesta que combina sus raíces y su amor por el arte oaxaqueño, presentando piezas que remiten a la sensualidad y los mitos de las Matlazihuas, figuras femeninas míticas que simbolizan los placeres de la vida.
Esta es una invitación a todos los que deseen vivir una experiencia única en la Ciudad de México. Acompaña a Isabel Sánchez en esta celebración de la vida, el arte y el tequila en Licorería Limantour, un espacio que, por unos días, se convierte en un santuario de arte y tradición.
