El juez de guardia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Mislata ha decretado libertad provisional sin medidas cautelares para el profesor de religión de 47 años detenido tras ser denunciado por un presunto delito de agresión sexual a siete alumnos de la misma clase de Educación Infantil, cuyas edades rondan los 4 años, en un colegio cercano a la ciudad de Valencia. Una decisión tomada este viernes por la tarde, de conformidad con el criterio del Ministerio Fiscal, tras no hallar en las diligencias urgentes de investigación practicadas antes y después de ser arrestado este jueves «indicio alguno de criminalidad fundado contra él» , según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana. El magistrado ha tenido en cuenta el resultado de la exploración urgente realizada a tres de los niños por especialistas del Instituto de Medicina Legal de Valencia. De ella no se desprende «ningún indicio de criminalidad» ni se ha apreciado indicios de ninguna situación relacionada con ningún abuso, ni con ninguno de los hechos investigados que han sido denunciados por los padres, consistentes en tocamientos, besos y fotografías íntimas . Además, el juez también ha analizado las manifestaciones del entorno laboral y familiar del detenido y el resultado inicial de los registros domiciliarios y el examen de sus dispositivos electrónicos y su teléfono móvil, que no han deparado tampoco en este momento procesal ningún indicio incriminatorio en su contra. Por todo ello, el instructor ha decidido remitir las actuaciones al Decanato de los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Mislata para que se reparta y asigne a uno de sus órganos judiciales por tratarse de hechos de fecha indeterminada. Como viene informando ABC este viernes y ha adelantado Levante-EMV, la madre de una de las presuntas víctimas acudió al centro educativo el pasado 4 de octubre para alertar de que el profesor de religión de su hijo estaba abusando de él. Algo que le habría confesado el propio menor cuando se encontraba jugando con varios juguetes . Días después, denunció los hechos ante la Policía Nacional incorporando más testimonios similares. La Conselleria de Educación activó el protocolo pertinente y puso los hechos en conocimiento de la Fiscalía de Menores.