Emmanuel Macron ha sido uno de los líderes europeos más críticos con la guerra israelí en la Franja de Gaza. El presidente francés ha condenado a lo largo de los últimos doce meses los constantes ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra población civil y ha pedido un alto el fuego con Hamás en el enclave palestino, donde han muerto desde el pasado 7 de octubre más de 40.000 personas, según los datos de las autoridades sanitarias locales.
Pero la invasión israelí del sur de Líbano lanzada a finales de septiembre y los recientes ataques contra las fuerzas de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas, que han dejado más de una decena de cascos azules heridos, han motivado una reacción más contundente por parte del Elíseo.
La pasada semana, Macron pidió el cese de las entregas exteriores de armamento a la zona para evitar que el conflicto en Oriente Medio derive en una guerra regional. Y este martes, poco antes de reunir al Consejo de Ministros en el Elíseo, ha querido lanzar un mensaje directo a Benjamin Netanyahu después de que el primer ministro israelí pidiera de nuevo la retirada de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para Líbano (FINUL, por sus siglas).
Netanyahu «no debe olvidar que su país se creó por una decisión de la ONU», ha subrayado el mandatario galo, en declaraciones recogidas por los medios franceses. Hacía referencia Macron a la votación en 1947 del plan para la división de Palestina entre un Estado judío y otro árabe en la Asamblea General de la ONU.
Pero el primer ministro israelí no ha tardado en responder. «Un recordatorio al presidente francés: no fue una decisión de la ONU la que estableció el Estado de Israel sino la victoria lograda en la Guerra de Independencia [el nombre que usa Israel para referirse a la guerra de 1948] con la sangre de nuestros heroicos combatientes», recoge un comunicado emitido por su oficina, que acusó a Naciones Unidas de aprobar «cientos de decisiones antisemitas contra el Estado de Israel», sin concretar ninguna.
