Las calles de Valdemoro han amanecido con un llamativo cartel que no pasa desapercibido entre sus vecinos. Al parecer, Juan habría sido infiel a la persona que colgó unos códigos QR con imágenes que exponen sus actos por todo el municipio. Sin embargo, la realidad es otra . Las fotos que se anuncian no existen. Ni siquiera Juan es real. Pues se trata de una campaña publicitaria que utiliza el morbo de un buen cotilleo para llamar la atención de todo aquel que pase por delante. «Juan, me engañaste. Dejo las fotos para que todos vean lo que haces». Esto es lo que se puede leer en tipografía Comic Sans plasmado en un folio de tamaño A4 colgado, en el que también hay un QR. Cuando los curiosos abren la cámara del móvil para escanearlo, se llevan una gran sorpresa. No hay ninguna imagen de la infidelidad de este individuo, sino una marca que está haciendo uso de la creatividad para llegar a más gente. Una cadena a las hamburguesas 'smash' de Perú popularizó este método . El equipo se dedicó a pegar varias copias del cartel en varios puntos de la ciudad y desde lejos grabaron las reacciones aquellos que se paraban a escanearlo: los sorprendidos solo podían reír al ver que el código QR no revelaba las fotos, sino que redirigía al perfil de Instagram de este restaurante. El impacto que generó este 'reel' -con casi 400.000 me gustas, 2.000 comentarios y cientos de compartidos- dio la vuelta al mundo y está siendo replicado por distintos comercios como método de promoción. En el caso de Valdemoro, donde también ha llegado esta campaña, el QR parece haber sido desactivado por el creador, por lo que se desconoce la identidad del responsable de colgar estos folios por esta localidad madrileña.