El presidente iraní, Masoud Pezeshkian, ha solicitado a las potencias europeas intervenir de manera urgente para frenar lo que describió como un “genocidio y crímenes” cometidos por Israel en las regiones de Gaza y Líbano. En una conversación telefónica con el mandatario francés, Emmanuel Macron, Pezeshkian afirmó que Irán apoyará cualquier propuesta para establecer la paz en Oriente Medio, mientras denuncia la inacción de Occidente.
El conflicto en Gaza y Líbano ha dejado centenares de muertos y heridos desde que comenzaron los ataques entre Israel y las fuerzas de Hezbolá, respaldadas por Irán. En medio de este contexto, Macron pidió al líder iraní colaborar en una desescalada general del conflicto, haciendo uso de su influencia sobre los actores armados de la región.
Pezeshkian reiteró su denuncia contra Israel, acusando al gobierno de Tel Aviv de perpetrar crímenes de guerra y genocidio en Gaza y Líbano. Según el presidente iraní, la intervención de las potencias europeas es crucial para detener las acciones israelíes que han resultado en la muerte de decenas de civiles y la destrucción de infraestructura en ambas regiones.
El mandatario subrayó que la posición de Irán en el conflicto siempre ha sido la de buscar una solución pacífica en Oriente Medio. A pesar del reciente asesinato del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, durante una visita a Teherán, Pezeshkian señaló que su gobierno se ha contenido de responder de inmediato, con la esperanza de que las potencias occidentales cumplieran su promesa de lograr un alto el fuego.
En este sentido, pidió a Macron y otros líderes europeos presionar a Israel para que cese sus ataques y evite una escalada mayor. Francia ha condenado la ofensiva israelí en el Líbano y ha solicitado frenar su suministro de armas, un gesto que Pezeshkian valoró como positivo.
Durante la conversación con Pezeshkian, Emmanuel Macron enfatizó la necesidad de una desescalada en el conflicto, y solicitó que Irán utilice su influencia sobre Hezbolá para reducir las tensiones. Francia ha jugado un papel diplomático clave en la región, tratando de mediar entre las partes involucradas para lograr un cese de hostilidades.
Macron destacó la "responsabilidad de Irán" por evitar que el conflicto en Gaza y Líbano se convierta en una guerra a mayor escala, y pidió cooperación internacional para lograr un alto el fuego duradero. Según fuentes francesas, el presidente iraní aseguró que su país estaría dispuesto a colaborar en iniciativas de paz siempre y cuando Israel detenga sus acciones militares.
La disputa, que ha involucrado a otros actores regionales como las milicias iraquíes y los hutíes de Yemen, ambos alineados con el "Eje de la Resistencia" liderado por Irán, ha complicado los esfuerzos internacionales para poner fin a las hostilidades.
Mientras las negociaciones diplomáticas continúan, la violencia en el terreno ha escalado con rapidez. Hezbolá reivindicó el ataque con drones que causó más de 60 heridos en la ciudad israelí de Binyamina, al sur de Haifa, en respuesta a los bombardeos sobre el Líbano. Estos ataques, según el Ministerio de Salud del Líbano, han dejado al menos 51 muertos en distintas zonas del país, incluida la capital, Beirut.
Por su parte, el ejército israelí ha intensificado sus bombardeos en el sur del Líbano, argumentando que está respondiendo a las provocaciones de Hezbolá. Las fuerzas de paz de las Naciones Unidas, que intentan mediar en el conflicto, también han sido afectadas, reportando que tropas israelíes ingresaron en una de sus posiciones en la frontera.
El número de víctimas civiles continúa aumentando, y tanto Israel como Hezbolá han mostrado disposición a seguir con las hostilidades, lo que dificulta las posibilidades de un alto el fuego inmediato, pese a los esfuerzos diplomáticos en curso liderados por Francia e Irán.
