La fecha para hacer el cambio de horario se aproxima en Estados Unidos, en una medida que impacta en casi todo su territorio y en particular a California. Este ajuste conocido como Daylight Saving Time (DST) tiene como objetivo aprovechar al máximo la luz solar. Sin embargo, en el Golden State se busca eliminar el horario de verano.
California tiene una peculiaridad, ya que allí los ciudadanos votaron en 2018 para autorizar a la Legislatura estatal a mantener un horario fijo. Años después de ese momento y otros esfuerzos políticos, el próximo domingo 3 de noviembre tendrán que mover sus relojes en punto de la una de la madrugada para retroceder una hora. Sin embargo, estas medidas podrían cambiarlo todo.
A principios de 2024, una nueva esperanza surgió para aquellos que no desean seguir ajustando sus relojes en California. El senador estatal Roger Niello presentó la SB 1413 en colaboración con legisladores de Oregón y Washington, con el objetivo de permanecer en el horario estándar. En una declaración a CBS News en marzo de este año, Niello expresó: "Si mi legislación prevalece el próximo noviembre, cambiaremos los relojes nuevamente y nunca más los ajustaremos después de eso".
Niello ha respaldado su medida basándose en la Proposición 7, argumentando que esta les autorizó por mayoría simple a cambiar al horario estándar de forma permanente, sin necesidad de la aprobación del Congreso. Desde su punto de vista, el horario estándar resulta más conveniente que el horario de verano, y cuenta con el respaldo de la Asociación Médica de California.
A pesar de los beneficios del cambio de horario, esta práctica ha generado disconformidad entre los ciudadanos estadounidenses. A continuación, las desventajas de implementar el horario de verano.
