En la situación actual, en la que cada año los productos y servicios aumentan su precio, algunos peruanos buscan oportunidades que ofrezcan altos rendimientos con riesgos controlados. En Perú, existen diversas opciones interesantes para invertir; sin embargo, hay dos que son más atractivas debido a su alta rentabilidad, que puede llegar a superar el 30%, y por la seguridad que ofrecen mediante mecanismos que mitigan el riesgo.
Ambas alternativas son cada vez más populares en el mercado nacional de inversiones. A través de plataformas que conectan a prestamistas con pequeños empresarios, los inversionistas pueden beneficiarse de tasas competitivas respaldadas por garantías reales. A continuación, conoce cómo funcionan estas dos formas de inversión y por qué se están consolidando como opciones rentables.
En el Perú, la diversificación de inversiones es esencial para obtener rendimientos atractivos sin comprometer la seguridad del capital. Entre las alternativas que están ganando terreno destacan dos: los préstamos con garantía hipotecaria y el factoring. Estas opciones ofrecen a los inversionistas la posibilidad de obtener retornos que pueden alcanzar hasta el 34% anual, a un bajo riesgo, debido a mecanismos de respaldo.
Los préstamos con garantía hipotecaria son una opción atractiva para quienes buscan seguridad y alta rentabilidad. Se trata de prestar dinero para financiar económicamente a empresarios o empresas que requieren de un capital para sus negocios. A cambio, ellos ofrecen un inmueble como respaldo, que se inscribe a nombre del inversionista en SUNARP. De esta forma, en caso de incumplimiento, el prestamista tiene la seguridad de poder recuperar su inversión a través de la venta del bien hipotecado. Sin embargo, hay que tener en cuenta ciertos requisitos.
Según la plataforma Prestapyme, el monto mínimo de una inversión en préstamos con garantía hipotecaria es de S/23.000. Asimismo, la rentabilidad puede variar entre el 16% y 34%, dependiendo de la evaluación de riesgo. El porcentaje se fija en un contrato junto al plazo acordado, que puede ser de 1 a 6 años.
Por otro lado, el factoring se ha convertido en una herramienta clave para las pequeñas y medianas empresas (pymes) que necesitan liquidez. A través de este mecanismo, se compran facturas por cobrar a un precio menor, obteniendo la diferencia como ganancia cuando la factura es pagada. Este sistema es ventajoso tanto para los empresarios, que acceden a liquidez inmediata, como para los inversionistas, que reciben retornos atractivos en plazos relativamente cortos.
La opción es ideal para recibir una rentabilidad en el corto plazo, debido a que los plazos de pago varían entre los 15 y 180 días, y únicamente se necesita un capital mínimo de S/100 para recibir una rentabilidad anual de hasta 18%. En cuanto a la seguridad de esta forma de inversión, las entidades que prestan el servicio de factoring están reguladas por la SBS o registradas en el ‘Reglamento de Factoring, Descuento y Empresas de Factoring’.
Los préstamos con garantía hipotecaria permiten financiar a personas o empresas que, a cambio de obtener el préstamo, dejan un bien inmueble como garantía. Páginas como Prestapyme ofrecen la opción de simular la inversión para saber, de acuerdo al plazo y al monto invertido, la ganancia que se obtendrá en dinero y porcentaje. Asimismo, dicha plataforma es uno de los sitios donde invertir en este modelo de negocio.