La Comisión de Economía del Congreso, presidida por Ilich López (Acción Popular) presentó un texto sustitutorio para derogar la Ley 31143, denominada Ley que protege de la usura a los consumidores de los servicios financieros, la cual fue publicada por el Legislativo en marzo de 2021. Anoche en el Pleno del Congreso pasó a cuarto intermedio.
Según la ley, el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) puede establecer las tasas de interés máximas y mínimas en las operaciones financieras de forma semestral; además, en caso de interés moratorio —que deben ser iguales a las que fija el BCRP para las operaciones ajenas al sistema financiero— queda prohibido que se cobre una penalidad o gastos adicionales. Se prohibe también la capitalización de intereses si un cliente incurre en mora.
Asimismo, la ley que se pretende derogar en la Comisión de Economía señala que las comisiones o gastos que los bancos cobran a sus clientes deben implicar la prestación de un servicio adicional o complementario a las operaciones contratadas y que justifiquen el traslado de dicho costo al usuario.
Y, si una entidad financiera cobra una tasa mayor a la máxima, incurriría en el delito de usura. La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP cumple con inspeccionar y denunciar, en caso un banco cometa usura, al Ministerio Público.
El Tribunal Constitucional respaldó hace unos meses la Ley 31143 y consideró que no vulnera la libertad entre las partes a la hora de vincularse en el sistema financiero; y así, desestimó la denuncia de inconstitucionalidad presentada por el Colegio de Abogados de Ica y el Poder Ejecutivo.
José Luna Gálvez (Podemos Perú) advirtió que la Comisión de Economía quiere que los bancos eleven las tasas de interés de los créditos "por encima del 200%" y dar luz verde al cobro "sin control" de comisiones y penalidades.
Y es que, en datos de la SBS, actualmente la TCEA por un préstamo de consumo —que incluye todos los costos de un crédito— oscila entre 30,55% y 125,41%; y para una tarjeta de crédito, entre 72,97% y 181,09%. La derogación de la ley eliminaría los topes, por lo que "se pretende favorecer a los bancos" —a juicio de Luna—.
Por su parte, Ilich López, presidente de la Comisión de Economía, sostiene que la ley contra la usura "ha sido una ley populista en el Congreso anterior" porque al eliminarse los topes —pese al retraso de los clientes— las entidades "les dicen que ya no pueden recibir crédito".
"¿A dónde recurren si la banca formal no les da crédito? Lógicamente, al crédito informal, que es el crédito por extorsión gota a gota. Entonces esta ley lo que ha hecho es poner en bandeja de plata, sobre todo a los micro y pequeños empresarios", reflexionó López en RPP.